Shanghái intenta una reapertura gradual tras su largo confinamiento por Covid
Mientras algunos comercios admiten clientes desde este lunes, se refuerzan los encierros para acabar esta semana con los contagios
Después de mes y medio de confinamiento por Covid , que en algunos barrios supera los 60 días , Shanghái intenta a partir de este lunes una gradual reapertura comercial. Algunos supermercados, restaurantes, tiendas de alimentación, barberías y farmacias podrán atender a un número limitado de clientes , según anunció ayer el vicealcalde Chen Tong. La decisión se debe al aparente control del brote de coronavirus, que el sábado registró su menor número de contagios detectados desde el 24 de marzo: 1.369, de los cuales 166 presentaban síntomas.
Pero todavía falta mucho para que esta megalópolis de 25 millones de habitantes, la más pujante y moderna de China, recupere la normalidad porque, al mismo tiempo, se ha endurecido el encierro en algunas zonas. Con el fin de alcanzar este viernes el objetivo del 'Covid 0 social', es decir, que no haya contagios fuera de los pacientes ya aislados, numerosas urbanizaciones atraviesan un «periodo de silencio» de tres días en el que todos sus vecinos no pueden recibir comida del exterior ni salir a hacerse sus pertinentes pruebas PCR.
Encerrados en sus casas desde finales de marzo, cuando las autoridades impusieron un confinamiento que en teoría iba a durar solo nueve días , los shanghaineses han sufrido multitud de abusos y barbaridades que han colmado su paciencia y les han llevado incluso a protestar contra las autoridades, algo poco frecuente en China. Además de la falta de alimentos, que eran comprados en grandes grupos por internet o suministrados por el Gobierno, se ha separado a los padres de los hijos y los positivos y sus contactos han sido internados en centros de aislamiento en condiciones deplorables. Todo ello sin contar la ruina de los negocios y el tremendo impacto no solo para la economía de China , sino de todo el mundo por la paralización de fábricas y del puerto de Shanghái, el de mayor tránsito de mercancías del planeta.
En el resto de China también han descendido los casos, con solo 41 positivos en Pekín, donde se teme un confinamiento como el de Shanghái.
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