«Resultó probado que le apretó el cuello y le provocó traumatismo… pero no que tuviera intención alguna»

Un magistrado portugués absuelve a un hombre que dio puñetazos y patadas a una mujer en el suelo, pero ahora el Tribunal de Apelación de Lisboa ordena repetir el juicio

Francisco Chacón

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Una insólita sentencia de un juez portugués está levantando una gran controversia porque considera probado que un hombre de 47 años agredió y asfixió a una mujer con la que mantenía una relación pero concluye « que no se aprecia intención », con lo cual absuelve al acusado.

El dictamen, que se acaba de conocer, se refiere a unos hechos acontecidos en 2017 en la isla de Faial, en el archipiélago de Azores, en cuya capital, Horta, se registró el conflicto. « Resultó probado que le apretó el cuello, le tiró de los pelos y le provocó traumatismo … pero no que tuviera intención alguna», establece la polémica sentencia.

En consecuencia, al letrado Antonio Calado no se le ha ocurrido otra cosa que dejar en libertad al hombre en cuestión… solo que ahora el Tribunal de Apelación de Lisboa ha tomado cartas en el asunto y ya ha anunciado que ordenará repetir el juicio.

Nada extraño, si tenemos en cuenta que las reacciones no se han hecho esperar y se multiplican las voces que piden la inhabilitación de ese juez, además de encadenarse numerosas protestas por el pésimo funcionamiento de la justicia portuguesa, donde ya se acumulan numerosos casos de sentencias decididamente machistas y que recurren a justificaciones insospechadas con tal de favorecer a los acusados del género masculino.

Para colmo, el texto legal del fallo incluye un lapsus que genera confusión y no se sabe a qué obedece: altera el nombre de la víctima en párrafos sucesivos (de Catia a Sara) y es otro de los argumentos que utiliza el magistrado para defender su decisión .

La agresión tuvo lugar a la salida de una discoteca de Horta. El hombre y la mujer se encontraban algo bebidos y protagonizaron una discusión. Entonces él le agarró del cuello hasta que ella sintió que se ahogaba y trató de escapar.

En ese momento, el individuo la derribó al suelo y le propinó varios puntapiés en la espalda, mientras se preparaba para ponerle una denuncia en comisaría y quejarse de que incluso le había robado la cartera .

Con equilibrado criterio, el tribunal superior de la capital portuguesa se pregunta en este sentido: «¿Cuál iba a ser la intención del acusado si no causar daño a la víctima? ¿Si no fuese con esa intención, por qué le iba a apretar el cuello, tirar de los pelos y darle puñetazos y puntapiés ?».

No es la primera vez que el juez Antonio Calado da la nota en relación a un caso de violencia de género. Se da la circunstancia de que, en 2013, rechazó como violencia doméstica el caso de una mujer obligada a huir de su casa con sus tres hijos tras ser amenazada por su marido con un cuchillo.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación