El portavoz de los obispos pide a los políticos superar «la dialéctica de la confrontación»
Admite que ha habido «una crisis de liderazgo» ante la crisis sanitaria del Covid-19
El secretario general y portavoz de la Conferencia Episcopal Española (CEE), monseñor Luis Argüello, pidió este martes a los partidos políticos superar "la dialéctica de la confrontación" para alcanzar "una verdadera reconstrucción democrática" tras la pandemia de Covid-19.
Durante su participación durante un foro telemático organizado por la Fundación Pablo VI bajo el título "Nuevos tiempos, ¿nuevas personas?", el prelado lamentó la falta de "un buen liderazgo" durante la crisis sanitaria.
"Que ha habido una crisis de liderazgo es casi evidente, por la novedad, por los momentos tan imprevisibles, por estar a la espera de lo que los técnicos o los políticos dicen, por el miedo a tomar decisiones o la reserva por las consecuencias que pudiera tener en el momento social y político concreto", aseguró el también obispo auxiliar de Valladolid.
En este sentido, el portavoz recordó que un "buen liderazgo es aquel que logra que las familias, las instituciones, las empresas sean capaces de ponerse en marcha". "El liderazgo no solo es aquel que es capaz de dictar lo que hay que hacer", añadió.
El secretario general compartió este foro junto a la filósofa y consejera permanente del Estado, Victoria Camps, quien insistió en la idea de que "un buen liderazgo debe incitar a la cooperación". "Tras la II Guerra Mundial sí hubo un gran liderazgo pero ahora no se ve", apuntó la filósofa.
"Repensar la organización social"
Ambos ponentes también se refirieron al elevado número de fallecidos en las residencias de ancianos por Covid-19. Sobre esta cuestión, el secretario general de la CEE pidió no pedir tantas responsabilidades a la administraciones públicas o a la gestión de sus directivos, sino plantearse por qué la sociedad ha tenido que llevar a los mayores a las residencias. "Ahora es el momento de repensar lo que estamos viviendo y nuestra propia organización social", indicó.
Para Camps, el elevado número de fallecidos en las residencias ha demostrado un "fallo en la administración y en el compromiso cívico". "Esta crisis nos ha demostrado que las residencias eran un puro negocio y nos ha puesto delante de los ojos que estaban en la precariedad. Lo primero que deberemos abordar es qué vamos hacer con la gente mayor. Este es un reto que tenemos por delante y es muy importante", aseveró.
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