Plan de Lombardía para construir un hospital en 6 días con 500 puestos de terapia intensiva
La solución del «modelo de Wuhan» chino, objetivo para evitar el colapso de en los departamentos de reanimación
Solidaridad de China con Italia: llega a Roma un avión con 9 técnicos chinos y 21 toneladas de material sanitario
Coronavirus, la última hora en directo
La región de Lombardía se ha convertido en el foco principal de la epidemia del coronavirus en Italia , el epicentro de los contagios y de los muertos, con 8.725 infectados hasta ayer jueves, y 744 personas fallecidas. Para evitar el grave riesgo de un colapso en los departamentos de cuidados intensivos de los hospitales, Lombardía ha ideado una solución de urgencia siguiendo el “modelo Whan” de China.
La guerra contra el coronavirus se ha revelado mucho más dura y difícil de los previsto, alcanzando proporciones inesperadas, lo que obliga a todo el país ha adoptar decisiones que no se hubieran ni siquiera imaginado el día anterior. Por ello se potencia esa lucha con el ejército y todo tipo de medios. El último ejemplo lo ha dado Milán, capital de Lombardía, cuya región, que cuenta con los mejores hospitales de Italia, del máximo nivel europeo y mundial, está sufriendo la devastación que causa el coronavirus,. Milán pretende construir en seis días un hospital en el lugar que acoge la feria. El asesor de Asuntos Sociales de Lombardía, Giulio Gallera , ha ilustrado el proyecto: «Se trata de un hospital en los pabellones del Mico de la Feria de Milán, para garantizar 500 puestos de terapia intensiva».
Estos pabellones ocupan 20.000 metros cuadrados en dos plantas. A esta estructura se añadirán otros 200 puestos de terapia intensiva dentro de una semana. Gallera ha explicado que «puede estar listo en 6 días, a condición de que se cuente con personal sanitario y respiradores para el departamento de cuidados intensivos». Se trata de un esfuerzo gigantesco, porque sirven 800 enfermeros y 150 médicos, para poder cubrir tres turnos de 8 horas cada día.
Solidaridad de China
En los primeros días de la epidemia en Italia, que explotó el 21 de febrero, el gobierno solicitó ayuda a otros países europeos, para contar con mascarillas y material para las urgencias en cuidados intensivos. No fue posible. Las mascarillas no se producen ya en los países europeos e Italia ha recurrido a otras naciones como Sudáfrica y China. Desde el primer día, el gobierno italiano planteó que el combate de esta epidemia solo se puede ganar con una cooperación internacional en todos los frentes.
Las autoridades italianas muestran hoy su frustración porque consideran que se ha perdido un tiempo precioso para haber unido las fuerzas de Europa en este combate. El máximo exponente sanitario de la lucha contra el virus en Italia, el profesor Walter Ricciardi, miembro de la Organización Mundial de la Salud y asesor ahora del Ejecutivo italiano, confesaba este miércoles a ABC que en una reciente reunión en Bruselas hubo ministros europeos que aún no se habían percatado de la gravedad de la situación.
En ayuda de Italia ha venido la China. En un avión especial, un Airbus-350, ayer llegaron al aeropuerto romano de Fiumicino nueve expertos sanitarios y 31 toneladas con material que Italia necesita con urgencia: Respiradores, ventiladores, cientos de miles de mascarillas y otros dispositivos sanitarios. El equipo médico estaba encabezado por el vicepresidente de la Cruz Roja de China , Yang Huichuan, y por Liang Zongan, un ilustre profesor de reanimación cardiopulmonar, junto a pediatras, enfermeros y otras personas que han gestionado la emergencia del coronavirus en China. Italia se ha emocionado con esta solidaridad de China. Dos países divididos por 10.000 kilómetros, pero unidos en una batalla contra reloj contra el coronavrus. Mientras, en Milán pone en marcha el modelo Wuhan, visto como el único objetivo posible para ganar esta guerra contra el Covid-19.