Corrupción en la universidad
El Ministerio de Ciencia y la Junta de Andalucía pagaron el estudio de tres tesis plagiadas
Tres de las tesis plagiadas lideradas por los catedráticos Gómez Moreno y Calvo Guirado se realizaron gracias a la financiación de Ciencia, de la Junta de Andalucía y del laboratorio cuyo producto ensalzaron en los estudios
Tanto los directores como los doctorandos firmaron un compromiso expreso en el que garantizaban el «respeto a los derechos de autor»
![Los catedráticos Gerardo Gómez Moreno y José Luis Calvo Guirado](https://s1.abcstatics.com/media/sociedad/2019/11/20/catedraticos-tesis-kneH--1200x630@abc.jpg)
Tres de las tesis con contenidos plagiados desveladas el lunes por ABC se realizaron gracias a un proyecto de investigación que fue financiado con dinero público y con el patrocinio de un laboratorio privado. Dos de ellas se leyeron en el año 2013 en la Universidad de Granada, que tiene abierto un expediente al catedrático Gerardo Gómez Moreno por irregularides en estos trabajos, y la tercera en 2015 en la Universidad de Murcia, ambos centros públicos.
El proyecto, titulado «Eficacia del ácido málico en el manejo de la xerostomía inducida por fármacos. Determinación de mucinas salivares y capacidad buffer», recibió fondos del Ministerio de Ciencia e Innovación, que actualmente también engloba Universidades, a través de Instituto de Salud Carlos III. Por su parte, la Junta de Andalucía financió el proyecto con cargo al Grupo de Investigación Farmacológica en Odontología.
ABC contactó el martes con ambas administraciones para saber a cuantía de los fondos públicos entregados, pero a cierre de edición no se habían facilitado los datos.
La tercera fuente de financiación fue privada, el laboratorio Dentaid, que comercializa el producto estudiado, Xeros Dentaid Spray. Este diario también contactó con la empresa, pero no hubo respuesta.
El estudio sirvió para que el profesor Gerardo Gómez Moreno y su socio, el entonces profesor de la Universidad de Murcia José Luis Calvo Guirado, actualmente catedrático en la privada Universidad Católica de Murcia (UCAM), publicaran tres artículos científicos junto a varios alumnos. Después se realizaron las tres tesis doctorales, plagias entre sí y también a otros autores.
Mismo producto
Las tres tesis son sobre el mismo producto pero cambiando los pacientes. El odontólogo Alejandro Uribe Maroni, que la leyó en la Universidad de Granada el 28 de junio de 2013, se centró en la «Eficacia del ácido málico 1% en pacientes con Xerostomía inducida por fármacos antidepresivos». Gerardo Gómez Moreno codirigió esta tesis, mientras que José Luis Calvo Guirado fue vocal del tribunal que la aprobó.
Unos días después, el 12 julio de 2013, y en la misma universidad, Maribel Cabrera Ayala presentó su tesis, «Eficacia del ácido málico 1% en spray en pacientes con xerostomía inducida por fármacos antihipertensivos». La codirigieron Gerardo Gómez Moreno y José Luis Calvo Guirado.
Casi dos años después, el 29 de mayo de 2015, el tercer doctorando, Juan José Fernández de Rota, defendió su tesis en la Universidad de Murcia: «Eficacia del ácido málico 1% en pacientes con xerostomía inducida por benzodiazepinas», También la codirigieron Gómez y Calvo.
En los tres tribunales se repitieron varios miembros colaboradores habituales de los dos profesores que encabezan la trama de doctorados irregulares desvelada por este diario.
Las tres tesis cuentan con dos conclusiones cada una y muy similares entre ellas: básicamente que el producto comercializado por el laboratorio catalán es eficaz en distintos tipos de pacientes. Maribel Cabrera expuso que «el spray de ácido málico al 1% mejoró la sensación de boca seca producida por el consumo de fármacos antihipertensivos» y que la aplicación del medicamente durante dos semanas «aumentó las tasas de flujo salival en reposo y estimulado».
Alejandro Uribe concluyó que «el spray de ácido málico al 1% es eficaz en la mejoría de la sensación subjetiva de boca seca» y que su uso «durante dos semanas aumentó las tasas de flujo salival en reposo y estimulada».
Por su parte, la tesis de Juan José Fernández de Rota tiene como conclusiones que «el uso de espray de ácido málico 1% durante dos semanas mejoró la sensación de boca seca producida por el consumo de benzodiazepinas» y que «el uso del spray de ácido málico 1% tras su utilización durante dos semanas aumentó las tasas de flujo salival en reposo y estimulado en pacientes con xerostomía por benzodiazepinas».
«Respeto a derechos de autor»
Todas las tesis deben respetar la autoría ajena, y en el caso de las dos que se leyeron en la Universidad de Granada se incluyó un compromiso expreso firmado tanto por los doctorandos como por los directores de tesis que dice: «El doctorando y los directores de la tesis garantizamos, al firmar esta tesis doctoral, que el trabajo ha sido realizado por el doctorando bajo la dirección de los directores de la tesis y hasta donde nuestro conocimiento alcanza, en la realización del trabajo, se han respetado los derechos de otros autores a ser citados , cuando se han utilizado sus resultados o publicaciones» .
La tesis de Uribe y la de Cabrera son iguales en un 41 por ciento, mientras que una cuarta parte de la de Fernández de Rota coincide con la de Cabrera. Se trata de textos copiados y pegados sin cita, cuya autoría original se desconoce. Es decir, no cumplen los requisitos de integridad académica de ninguna universidad.
Además, Uribe plagia un artículo publicado en 2008, «Mecanismos de acción de los Antidepresivos», de Carla Carmiglia, Rodrigo Soto y Yonathan Galaz, que le supuso otro 14 por ciento del contenido de su tesis, que, como la de Cabrera, también tiene textos colgados en Wikipedia, un 3 por ciento.
A su vez, Cabrera y Fernández de Rota plagian también textos de otros autores, copiando y pegando párrafos completos sin comillas. En el mejor de los casos incluyen una cita genérica, referida a una frase puntual, y antes y después copian varios párrafos literales , una práctica rigurosamente prohibida, pues constituye plagio académico.
Juan José Fernández de Rota dijo este martes a ABC que trabajó con «material» que le suministraron «mis directores de tesis» , y que no fue consciente de haber cometido plagio alguno. Defiende la licitud de su trabajo.
Endogamia
La tesis de Alejandro Uribe la dirigieron, además de Gerardo Gómez, Rafael Arcesio y Javier Guardia, que estuvieron presentes en otras tres tesis con plagios leídas el mismo día en la Universidad de Murcia, desveladas también ayer en este diario. Por su parte, la de Maribel Cabrera la dirigió Gómez Moreno junto a Antonio Aguilar-Salvatierra, al que habían doctorado un año antes en esa tanda de tres tesis de Murcia.
Otros dos miembros del tribunal de Uribe, Cristina Barona y José Martínez, ya lo habían sido, precisamente, del de Aguilar-Salvatierra.
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