Las mascarillas vuelven a Israel en los grandes eventos al aire libre

El avance de la variante Delta del coronavirus por Israel ha hecho que el Gobierno vuelva a imponer restricciones. Pese al avance de la campaña de vacunación y que fue el primer país del mundo en quitarse la mascarilla, desde el domingo entraron en vigo r nuevas normas que buscan controlar la curva de contagios y reducir el número de hospitalizados. En las últimas semanas el país hebreo ha superado la barrera de los 3.000 contagios durante varios días seguidos.

Pese a la alegría con que se celebró el fin de la mascarilla, desde este domingo esta vuelve a ser necesaria al aire libre cuando estén congregadas más de 100 personas , según informa el diario 'The Jerusalem Post'. La norma sobre la utilización de esta prenda se levantó el pasado mes de abril. Sin embargo, habrá excepciones: no será necesaria en menores de siete años, deportistas o personas con algún tipo de discapacidad.

Además, los funcionarios volverán al teletrabajo. En las oficinas se reducirán a los trabajadores al 50%. El sector privado también ha recibido órdenes para flexibilizar el teletrabajo.

En el caso de que un niño menor de 12 años entre en contacto con un contagiado con coronavirus, su cuidador principal debe entrar en cuarentena con él, incluso si está vacunado. Cualquier padre con un hijo menor de 12 años que haya impedido que este se realice una prueba de coronavirus o entre en cuarentena deberá pagar una multa de 3.500 séquel israelíes (unos 920 euros). Cualquier persona que no respete la cuarentena, además, será multado con 5.000 séquel (1.320 euros).

Por otra parte, a partir del 8 de agosto, cualquier persona no vacunada (que tiene la opción de recibir la vacuna pero elige no hacerlo) que desee hacerse una prueba de coronavirus deberá pagarla. El coste de las pruebas seguirá estando cubierto por el estado para todas las personas vacunadas y aquellas que no puedan recibir la vacuna.

En cuanto al certificado de vacunación , será necesario para acceder a todos los espacios públicos, incluidos eventos culturales y deportivos, gimnasios, restaurantes y comedores, conferencias, atracciones turísticas y lugares de culto. Las reglas se aplicarán incluso cuando haya menos de 100 personas.