Manny Manitas blinda un colegio contra la pandemia
Todo lo necesario para blindar un colegio de la pandemia está en la ferretería de la esquina
![Manny Manitas blinda un colegio contra la pandemia](https://s2.abcstatics.com/media/sociedad/2020/11/16/sistema-covid-U45527875273WCH-1248x698@abc.jpg)
La mujer de Frank Helleis trabaja como profesora en un colegio de Maguncia. El pasado verano, pensando en una vuelta al cole presencial y al peligro de contagios, ideó un sistema casero para evitar la expansión de los aerosoles en el espacio y presentó al proyecto al director del colegio Bretzenheim, Roland Wollowski. El hecho de que Helleis sea un químico que trabaja para el Instituto Max Planck aceleró el visto bueno de la dirección del colegio y ayudó bastante también el presupuesto adjunto a los planos. Todo lo necesario para instalar un sistema de limpieza del aire podía encontrarse en la ferretería de la esquina y por un coste total de unos 200 euros. Se pusieron manos a la obra y hoy pueden presumir de no haber registrado ni un solo contagio en sus aulas. El Ministerio de Educación de Renania-Palatinado está examinando su uso para instalarlo en otras escuelas.
Se trata de un sistema de ventilación por extracción muy simple, pero que elimina el 90% de los aerosoles que potencialmente contienen coronavirus del aire de la habitación. Está basado en el principio de que todos producimos aire caliente que se eleva hacia arriba y dirige ese flujo de aire al exterior para que se lleve con él partículas de aerosol del virus.
La construcción es muy sencilla: un paraguas ancho, de plástico, que cuelga sobre cada pupitre a la altura del techo y que se conecta a una tubería. Todas las tuberías conducen a una central, que a su vez conduce al exterior a través de una ventana inclinada. Un ventilador al final de la tubería asegura que el aire sea transportado activamente al exterior.
![Imagen de la clase con el sistema de filtrado ya instalado](https://s3.abcstatics.com/media/sociedad/2020/11/16/sistema-covid2-U21233302441JeG-510x349@abc.jpg)
«Sonaba tan simple y convincente que decidimos participar de inmediato», dice Roland Wollowski, que relata que Frank Helleis y sus colegas ensamblaron el sistema ellos mismos en un aula durante las vacaciones de verano y han estado supervisando su funcionamiento desde entonces. «Nuestras mediciones han ido demostrando que el sistema de salida del aire, con las campanas, elimina continuamente más del 90 por ciento de los aerosoles», dice Helleis. Aunque el sistema simple funciona sin las campanas en forma de embudo sobre las mesas individuales, éstas recogen los aerosoles allí de manera específica. El físico lo ha demostrado con espectrómetros de aerosol y aerosoles generados artificialmente.
«Me propuse ofrecer una alternativa inteligente a los costosos sistemas de filtro y, dado que las demandas de la sala también son bajas, todo lo que necesita es un enchufe y una ventana abatible o tragaluz», describe. «También pudimos lograr que la autoridad educativa de la ciudad de Maguncia se entusiasmara con el proyecto y aportase un apoyo constructivo», informa Wollowski, «estamos muy contentos por la excelente cooperación y hemos decidido equipar el mayor número posible de aulas, con la ayuda activa de toda la comunidad escolar, en las próximas semanas». El director celebra que, además, se reducen las pérdidas de energía relacionadas con la ventilación, porque evita tener que mantener las ventanas abiertas durante horas y el consiguiente gasto de calefacción, «lo que a su vez beneficia al clima «.
Se requiere, eso sí, cierta pericia científica y habilidad manual , ya que las piezas deben ensamblarse manual de individualmente. Helleis ha elaborado unas instrucciones esquemáticas, parecidas a las de la famosa tienda de muebles sueca, para su publicación en la web del Instituto Max Planck de Química y su uso por todos los colegios que deseen instalar el mismo sistema. También un formulario de contacto que los interesados pueden utilizar para pedir más instrucciones de forma gratuita. También se ha puesto en contacto con empresas que podrían fabricar piezas moldeadas individuales para la construcción, lo que facilitaría aún más las réplicas. Está convencido, de hecho, de que el sistema seguirá en activo después de la pandemia. «Nuestro sistema también resuelve el conocido problema del CO2 en las aulas. Porque no solo transporta aerosoles al exterior, sino que también reduce la acumulación de CO2, para que los alumnos puedan concentrarse mejor en la clase«.
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