Inés Arrimadas: «La educación de nuestros hijos no la tiene que decidir la ministra Celaá»
La presidenta de Ciudadanos critica la nueva ley de educación y hace un alegato en favor de la libertad de las familias
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La presidenta de Ciudadanos (Cs), Inés Arrimadas , se ha acercado a la manifestación de la educación concertada en los alrededores del Congreso de los Diputados , para mostrar su solidaridad después del debate de la «ley Celaá» en el pleno de la Cámara Baja. «Hoy queremos expresar la defensa de la libertad. La educación de nuestros hijos no la tiene que decidir la ministra [Isabel] Celaá», ha clamado, en declaraciones a los medios de comunicación.
La diputada de Cs Marta Martín , que acompañaba a Arrimadas, ha subrayado esta mañana que su partido votará «no con las dos manos» a una reforma legal que ven oscurantista y «sectaria». Al ataque a la educación concertada y especial, al que Cs se ha opuesto siempre de manera frontal, se une además la enmienda pactada entre PSOE , Unidas Podemos y ERC con la que excluyen el carácter vehicular del castellano en Cataluña.
Por ello, Arrimadas ha incidido en que no solo Celaá no puede decidir por los padres la educación de sus hijos; tampoco deben hacerlo «ni los nacionalismos ni los gobiernos de ningún color político». Cs fue uno de los partidos que con más ahínco defendió un gran pacto educativo durante el Gobierno de Mariano Rajoy , pero el PSOE se levantó de la mesa en marzo de 2018 rompiendo toda posibilidad de acuerdo. El consenso, tal y como se ha comprobado hoy en el debate , brilla por su ausencia en la «ley Celaá».
«Defendemos la concertada, la especial, que sean los padres los que elijan. No puede hacerse una ley que rompa la libertad de los padres a elegir la educación de nuestros hijos. Vamos a estar siempre al lado de los padres. Como madre quiero poder elegir. Esto es una lucha por la libertad», ha insistido, vehemente, la líder de los liberales.
Libertad en la lengua
También, ha añadido Arrimadas, debe garantizarse que los alumnos puedan matricularse «en su lengua materna». En el caso de Cataluña , en castellano o en catalán, en igualdad de condiciones. Algo prácticamente imposible por la pasividad del bipartidismo, según denuncia Cs, desde hace décadas. «Todo lo que sean imposiciones, vamos a estar siempre en contra», ha sentenciado Arrimadas.
Su partido, una vez se apruebe la ley definitivamente, buscará una alianza con algún partido político para sumar los cincuenta diputados necesarios para recurrir ante el Tribunal Constitucional la marginación del castellano. Un asunto que Cs ya ha llevado a Europa y que, si no puede con un pacto con otra formación, trasladará al Defensor del Pueblo para pedirle que interponga el pertinente recurso de inconstitucionalidad.
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