Todas las personas que en estos de fiesta religiosa van a llevar sobre sí alguna imagen de cierto peso, durante las procesiones, deben seguir unos sencillos consejos que el Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid (CPFCM) ha divulgado para evitar lesiones.
“Los sentimientos, el espíritu de sacrificio y la motivación, permiten al costalero obtener el máximo rendimiento de sus capacidades, lo que hace que supere así las dificultades físicas, incluido el dolor”, refiere José Santos, secretario general del CPFCM. “Pero no hay que obviar las posibles consecuencias de un esfuerzo inadecuado”.
Medidas preventivas
El CPFCM recomienda:
-Realizar un entrenamiento físico previo para evitarlo. “La mayoría no sigue un programa específico de fortalecimiento muscular”, dice Santos. Se debe trabajar la fuerza, la resistencia y la coordinación
-Evitar cansancios excesivos y esfuerzos innecesarios para que la ilusión y la motivación del costalero se vean correspondidas por un soporte físico adecuado.
-Someterse a un reconocimiento médico previo y realizar una visita al fisioterapeuta antes de participar, tanto en los ensayos como en las procesiones.
-Realizar estiramientos antes y después de salir a la procesión.
-Adoptar medidas protectoras como el uso de fajas o vendajes, sobre las partes del cuerpo más susceptibles de sufrir lesiones.
-Una vez iniciada la marcha, para aliviar los dolores que provoca el exceso de carga hay que mantener la cabeza erguida y la mirada al frente para evitar lesiones en el cuello.
-Contraer la musculatura abdominal y lumbar; así como mantener una postura correcta, con el tronco erguido y la espalda recta.
-Pisar con toda la planta del pie.
-No flexionar del todo las articulaciones del codo y la muñeca.
-Beber líquidos de forma continuada.
De esta manera, las lesiones son evitables.