La técnica se llama LDL-Aféresis, un nombre complicado tras el que se esconde simplemente una especia de diálisis, pero de lípidos. En resumen, una separación de los componentes de la sangre para quitar el componente que causa enfermedad.
Tal es el caso de las 100.000 personas que en España sufren de hipercolesterolemia familiar, una patología hereditaria que se expresa con niveles muy altos de colesterol (entre 290 y 1.000 mg/dl) desde edades muy tempranas y que, además, es la causa genética más frecuente de enfermedad coronaria y de infarto prematuro.
«Estos pacientes presentan desde el nacimiento valores de LDL colesterol que duplican o triplican los de la población general y no pueden ser controlados únicamente con fármacos y con hábitos de vida saludables. Presentan un riesgo muy elevado de sufrir una cardiopatía isquémica y de fallecer por un evento cardiaco antes de los 50 años», », explica el doctor Pedro Mata, presidente de la Fundación Hipecolesterolemia Familiar.
Por este motivo, desde hace algún tiempo se está empleando la aféresis como tratamiento complementario en los pacientes que presentan una hipercolesterolemia familiar grave, porque reduce en más de un 70 por ciento los niveles de colesterol de manera inmediata.
«Este descenso brusco de los niveles de lípidos mejora significativamente y de forma inmediata la función arterial, reduce las placas de ateroma y disminuye el riesgo cardiovascular», afirma el doctor José Luis Díaz, del Servicio de Medicina Interna del Complejo Hospitalario de A Coruña.
«Hace poco más de un año que implantamos esta técnica en el Hospital de A Coruña. Actualmente estamos tratando a tres niños con hipercolesterolemia familiar homocigota en los que el tratamiento hipolipemiante con fármacos no funcionaba. La respuesta está siendo magnifica», agrega el doctor Díaz.
Niños con enfermedades de ancianos
En estos pacientes los niveles de colesterol no se controlan adecuadamente con dieta y tratamiento farmacológico y en especial en los casos de hipercolesterolemia familiar homocigota, una forma rara de esta enfermedad genética. «Se expresa desde el nacimiento y los niños que presentan este trastorno tienen cifras de colesterol total entre 600-1.000 mg/dl y xantomas (afección cutánea por la que ciertas grasas se acumulan bajo la superfie de la piel. Luce como una protuberancia de color amarilla). También pueden presentar eventos cardiacos coronarios y estrechamiento de la válvula aórtica antes de los diez años», aclara el doctor Mata.
Además, con esta técnica se puede evitar el trasplante hepático, que «entraña muchos riesgos, más si el paciente es un niño, ya que le supondría un estado de inmunodepresión para el resto de su vida», agrega el experto.
Ahora la aparición de la técnica de aféresis DALI elimina de forma selectiva las lipoproteínas de la sangre sin necesidad de una separación preliminar del plasma, preservando los hematíes y las plaquetas.
«La nueva técnica DALI tiene varias ventajas: fundamentalmente su sencillez y facilidad de manejo porque no se precisa una separación inicial del plasma. Por otro lado, la tecnología con la que trabaja permite un flujo bajo de sangre por lo que inicialmente en niños no es necesario crear una fístula arteriovenosa para el acceso vascular y puede colocarse un catéter por vía venosa», concluye el doctor Díaz.
