Son muchos los deportistas que se han enfrentado al reto de cruzar los 14 kilómetros que separan la Península Ibérica del continente africano. Todos ellos han de someterse a una dura preparación física para soportar el desgaste que supone nadar en mar abierto, así como una consecuente preparación mental.
Esto puede suponer un reto considerable para cualquiera de nosotros. Sin embargo, si el atrevido nadador es Jacobo Parages, un paciente con espondilitis anquilosante, el reto se convierte, además, en una formidable historia de superación personal.
Jacobo es un empresario madrileño al que hace diecisiete años le diagnosticaron espondilitis anquilosante, una enfermedad reumática crónica que provoca una pérdida progresiva de lamovilidad.
Este cambio en su vida, le impidió continuar con las actividades que practicaba, como el deporte. Tras pasar por diferentes especialistas y tratamientos, la vida de Jacobo dio un cambio hace seis años, cuando el doctor Jesús Sanz, reumatólogo del Hospital Puerta del Hierro, decidió administrarle un tratamiento innovador basado en terapias biológicas, que ha resultado clave para reducir la inflamación de las articulaciones de Jacobo, la actividad de su enfermedad y que hamejorado su movilidad espinal.
El afán de superación y el coraje de Jacobo le han llevado a cumplir con éxito el reto de cruzar el Estrecho de Gibraltar a nado. Además, el empresario ha seguido un entrenamiento diario y constante que ha revitalizado la movilidad de sus articulaciones y que le ha permitido superar, incluso, la actividad deportiva que realizaba antes de la enfermedad.
Con esta hazaña, Jacobo ha querido demostrar a todos los pacientes crónicos que el diagnóstico de una enfermedad de este tipo no tiene por qué poner punto y final a aquello con lo que disfrutaban antes de ser diagnosticados.
Labor de concienciación
A la vez, se propone concienciar al conjunto de la sociedad sobre esta enfermedad, que aún resulta desconocida para muchos, así como dar a conocer los satisfactorios resultados de las terapias biológicas que han transformado la evolución de su enfermedad y han incrementado su calidad de vida.
En suma, su caso evidencia la eficacia de los avances médicos y la importancia de la innovación en los tratamientos de enfermedades crónicas.
Según la Sociedad Española de Reumatología, más de 28 millones de personas padecen enfermedades reumáticas en nuestro país. La espondilitis anquilosante es una de ellas.
Esta enfermedad provoca inflamación de las articulaciones y de la columna vertebral y afecta a la capacidad motriz de los pacientes.
Además, el impacto socioeconómico de esta enfermedad pasa por la discapacidad laboral y unmayor uso de recursos sanitarios. Suele comenzar en los jóvenes y, con el tiempo, puede provocar incapacidad permanente y deformidades. Por ello, un diagnóstico temprano puede resultar determinante para la evolución de la enfermedad en los pacientes ya que, a menudo, dicho diagnóstico requiere de varios años desde la aparición de los primeros síntomas.
Los medicamentos biológicos han demostrado reducir la inflamación de las articulaciones y la actividad de la enfermedad, disminuyendo el dolor y mejorando la función física.
Estos fármacos se sintetizan a partir de la utilización de células de ADN, que actúan directamente sobre las moléculas que están involucradas en el proceso de inflamación de las articulaciones.
Tratamiento menos agresivo
Las terapias biológicas actúan inhibiendo la tendencia natural de las moléculas mediadoras en el proceso de inflamación, reduciendo así el avance de la enfermedad.
De esta forma, estos tratamientos resultan menos agresivos dado que, a diferencia de los fármacos, no producen un efecto global sobre el sistema inmunológico. J
acobo ha recorrido diecinueve kilómetros a nado en tres horas, junto a dos barcos que le acompañaban en la travesía, uno para atender las necesidades básicas y de avituallamiento del nadador y otro, de mayor tamaño, para tomar los datos necesarios sobre el estado delmar, valorando las corrientes marinas y los animales que podían encontrar a su paso.
El reto ha sido posible gracias también al apoyo de su entrenador y al importante papel que juega el médico para el tratamiento de este tipo de enfermedades, donde la prescripción se acuerda entre el médico y el paciente, lo cual permite una dosis ajustada a cada caso. Jacobo, lejos de conformarse con este éxito, ya tiene en mente un nuevo reto que aún es secreto.