Los pacientes españoles que sean diagnosticados de cáncer de pulmón de célula no pequeña (CPCNP) ALK podrán acceder a un nuevo tratamiento oral y personalizado, una vez que han recibido una línea de tratamiento. Actúa inhibiendo específicamente la kinasa del linfoma anaplástico (ALK, por sus siglas en inglés), algo que es posible gracias al avance en el conocimiento de biomarcadores identificables y alteraciones genéticas con características moleculares distintas, que presentan algunos pacientes.
La medicina personalizada, basada en terapias dirigidas en pacientes segmentados, ha evolucionado para permitir actuar específicamente sobre biomarcadores en cáncer de pulmón y las vías metabólicas, lo que produce un gran beneficio clínico para los pacientes.
“Desde la perspectiva de los oncólogos, es realmente esperanzador ver cómo los avances en medicina personalizada aumentan las expectativas de los pacientes, cuando hace unos años la única opción de tratamiento era la quimioterapia”, afirma el doctor Javier de Castro, del servicio de Oncología del Hospital Universitario La Paz.
“La identificación de pacientes con cáncer de pulmón portadores de una determinada característica genética y el descubrimiento de medicamentos específicos que actúen sobre la misma, permite ofrecer a estos pacientes un tratamiento que contribuye a la reducción del tumor y retrasa la progresión de la enfermedad con una terapia cómoda al ser oral y con escasos efectos sobre la calidad de vida de los pacientes”, continúa el doctor Castro.
El cáncer de pulmón en cifras
En España se diagnosticaron 18.162 nuevos casos y recaídas en estado avanzado de cáncer de pulmón en 2013. A nivel mundial, se calcula que alrededor de 1,4 millones de personas fallecen cada año por esta enfermedad. Aproximadamente, el 3,5 y el 5% de los tumores de cánceres de pulmón de células no-pequeñas (CPCNP) son ALK positivos. En fase avanzada, la tasa de supervivencia de pacientes con CPCNP que superan los 5 años es del 6%.
La alteración en el gen ALK permite identificar aquellos pacientes con más posibilidades de beneficiarse de este tratamiento dirigido. “Se trata de una alteración poco frecuente, pero cualquier paciente con CPCNP es susceptible de tener este reordenamiento independientemente de la histología, hábito tabáquico, edad o género”, explica el doctor Fernando López-Ríos, del servicio de Anatomía Patológica del Centro Oncológico Clara Campal (Madrid).
Al identificar las alteraciones en el gen ALK, se pueden ofrecer terapias muy efectivas con menos efectos secundarios.