![La realidad virtual ayuda a la rehabilitación del daño cerebral](/RC/201310/31/salud/Media/tereha--647x231.jpg)
La Universidad Politécnica de Valencia ha presentado Tereha, un sistema tecnológico para la rehabilitación de pacientes con daño cerebral. Esta plataforma trabaja con dos módulos de rehabilitación. Uno para la capacidad motora y otra para la cognitiva, mediante dispositivos audiovisuales interactivos y juegos virtuales que se pueden adaptar a la actividad física y cognitiva que puede hacer el paciente.
Los juegos de realidad virtual, ideados para mejorar la rehabilitación motora, se valen de la tecnología Kinect, y consisten en la simulación de tareas cotidianas, como clasificar ropa en cestos por colores o cocinar. El paciente utiliza, durante la sesión, tanto las extremidades afectadas por la parálisis como las no dañadas, como si fuera la vida real. Así logra aprender a coordinar ambas. Mientras que para la rehabilitación cognitiva se ha desarrollado una mesa táctil con varios juegos, en donde pueden interactuar hasta cuatro pacientes.
“Este proyecto nos permite la realización de ejercicios terapéuticos de forma interactiva, aumentando la motivación del individuo en su tratamiento y posibilitando la medición objetiva y el conocimiento del estado real del paciente y su avance”, afirma Joan Ferri, director del Servicio de Daño Cerebral de Hospitales Nisa.
Después de ensayos de seis meses de duración, los primeros resultados con neuroimágenes, realizadas con resonancia magnética, prueban mejorías mantenidas en el tiempo. Sobre todo los que han sido tratados con el videojuego llamado ‘Escalada de conciencia’ que han tenido una evolución positiva. Por otra parte, se genera una gran autonomía entre los pacientes, al ser ellos mismos quienes eligen los juegos, según sus preferencias y aptitudes. Además, la competencia que se genera en los juegos grupales les incentiva.
Un proyecto multidisciplinar
“El proyecto Tereha enfoca el proceso rehabilitador desde distintos puntos de vista: fisioterapia, rehabilitación cognitiva, neuropsicología, etc.”, dice Mariano Alcañiz, director del Labhuman. “Es por ello que ha dado lugar a herramientas que intentan rehabilitar no sólo déficits motores o cognitivos, sino también fortalecer otros conceptos como la conciencia de enfermedad o la atención a las familias, procesos clave en la rehabilitación de los pacientes y que raramente son contemplados en este tipo de proyectos. Esto sólo ha sido posible a partir de la colaboración entre especialistas tecnológicos y clínicos. Y es ahí donde realmente ha radicado el éxito de este proyecto, en la convivencia de ingenieros en un centro de neurorrehabilitación, y de neurólogos, médicos rehabilitadores, neuropsicólogos, etc. en una universidad politécnica”.
La Universidad Politécnica de Valencia enumera las ventajas de Tehera: la relación entre los pacientes que juegan juntos es un factor clave para la recuperación, el aliciente y la motivación; permite que los pacientes sean más realistas respecto a sus expectativas de futuro; contribuye a que sus familiares encuentren métodos para ayudarles, evitando así la impotencia que sufren en la actualidad”.