Especialistas de la Clínica Universidad de Navarra realizan una nueva técnica de cateterismo en pacientes con fibrilación auricular (arritmias cardiacas persistentes) que permite dejar de tomar Sintrom u otras medicaciones anticoagulantes en un número elevado de casos.
El nuevo procedimiento consiste en introducir -a través de un catéter y sin necesidad de cirugía abierta- un dispositivo que consigue cerrar una cavidad próxima a la aurícula izquierda del corazón, denominada orejuela, en la que habitualmente se originan los trombos, explican desde la Clínica.
De este modo se evita el riesgo de que los coágulos lleguen desde la orejuela hasta el cerebro, causando un accidente cerebrovascular, entre otras posibles y graves complicaciones.
La nueva técnica está indicada «en todos aquellos pacientes, de cualquier edad, con fibrilación auricular y que tengan que tomar Sintrom. Especialmente en aquellos que presenten problemas en el control de la coagulación sanguínea», explica el director del Departamento de Cardiología y de la Unidad de Arritmias de la Clínica Universidad de Navarra, el doctor José Ignacio García Bolao, quien, junto a la doctora Naiara Calvo (especialista del mismo departamento), realiza los procedimientos.
¿Cómo es el procedimiento?
La intervención se realiza bajo anestesia general para evitar al paciente las molestias de la ecografía transesofágica, necesaria para guiar a los especialistas en la correcta implantación del dispositivo.
La suma de los dos procedimientos (tratamiento de la fibrilación auricular y cierre de la orejuela) tiene una duración aproximada de 3 ó 4 horas. En total, el paciente precisa un ingreso hospitalario de entre 24 y 48 horas.
Posteriormente, durante los tres meses siguientes, deberá acudir a revisiones periódicas de control. Al cabo de ese período, en caso de que el procedimiento haya tenido éxito, se le podrán retirar los fármacos anticoagulantes.
Con esta intervención, subraya el doctor García Bolao, «la principal ventaja que obtiene el paciente es la retirada de la anticoagulación para evitar la formación de trombos, con todos los efectos secundarios que conllevan estos fármacos, como es el riesgo de hemorragias importantes como consecuencia de una herida, caída u otra circunstancia, además del riguroso control mensual que debe llevar de los niveles de coagulación sanguínea».