La postura, o mejor la mala postura, es uno de los problemas de salud que más desapercibidos pasan y que, sin embargo, acarrean graves consecuencias graves para zonas sensibles del cuerpo como la lumbar. Según el estudio realizado por la Fundación Mapfre titulado ‘Las enfermedades de la columna lumbar y su relación con el trabajo en España’, prácticamente todos los individuos sufrirán un episodio de lumbalgia en algún momento de su vida.
Cada año un entre un 5 y un 25% de la población general sufrirá esta dolencia, pero esta incidencia aumenta hasta un 50% en edad laboral, entre los 18 y los 65 años. Actualmente, se trata de la principal causa de baja laboral en España, lo que implica una media de 6 millones de jornadas perdidas cada año y un coste de hasta 112 millones de euros para la Seguridad Social.
Según datos de la Dirección General de Investigación e Innovación de la Comisión Europea se estima que en todo el viejo continente existen unos 67 millones de personas afectadas por este problema. Ante tal realidad, investigadores y empresas comienzan a desarrollar dispositivos que aporten soluciones eficaces y eficientes al tratamiento de estas dolencias.
Monitorizar los músculos
Uno de ellos, que tiene prevista su llegada al mercado a lo largo del próximo año 2014, se llama Lumbia y consiste en un cinturón ‘inteligente’, cuyos sensores monitorizan el movimiento de tres pares de músculos de la zona lumbar. «Si el paciente tiene la postura incorrecta, vibra hasta que la corrija», explica José Miguel Azcoitia, del centro privado de investigación aplicada Tecnalia, encargado del desarrollo de este dispositivo con el apoyo financiero de FIK (una agrupación de inversores). La investigación y el desarrollo de este producto ha requerido casi cuatro años y, en estos momentos, da comienzo su fase de industrialización y comercialización.
Además de ayudar a quien lo utilice a mantener el cuerpo en la posición correcta, los sensores envían toda la información que recoge al ordenador en el que haya sido instalado su software. Así, el correspondiente especialista puede controlar a distancia la evolución y el seguimiento de la patología. Con estas dos prestaciones, Lumbia tiene un doble objetivo: por un lado, la rehabilitación de la persona con esta dolencia, y por otro, prevenir daños en los pacientes sanos con mayor riesgo de sufrir dolor lumbar.
Más datos, mejores terapias
En el primero de los casos, el dispositivo, además de ayudar al paciente a corregir las malas posturas, pretende facilitar la terapia que los médicos ofrecen gracias a los datos que obtienen para analizar la evolución durante el periodo de tiempo que dura la terapia. Así, puede usarse como herramienta de evaluación que aporta al terapeuta información fiable y precisa sobre los patrones de comportamiento de la zona lumbar del paciente. El segundo de los objetivos es prevenir daños en los pacientes sanos con riesgo de sufrir dolor lumbar, ya que ayuda a reeducar su postura.
Lumbia estará disponible en el mercado el próximo año y la empresa italiana BTS será la encargada de su distribución a nivel internacional, cuyo objetivo es llegar por un lado, a los especialistas del sector para que puedan emplearlo con sus pacientes, y por otro, a las empresas para que puedan prevenir los daños en sus trabajadores. Sobre esto último, el dispositivo no es unipersonal sino intercambiable, con lo que podría ser utilizado por distintos trabajadores en un mismo centro de trabajo.