El dolor tiene género
Un estudio muestra por primera vez que las neuronas de la médula espinal procesan las señales de dolor de manera diferente en las mujeres que en los hombres
Las mujeres y los hombres procesan las señales de dolor de manera diferente según un nuevo estudio que ha analizado por primera vez las neuronas de la médula espinal que lo trasmiten.
Noticias relacionadas
Un estudio publicado en la revista «Brain» muestra por primera vez que las neuronas de la médula espinal procesan las señales de dolor de manera diferente en las mujeres que en los hombres. El hallazgo podría conducir a tratamientos más y más personalizados para el dolor crónico, que se necesitan urgentemente, más ahora a raíz de la epidemia de opiáceos.
Aunque se sabe desde hace mucho tiempo que las mujeres y los hombres experimentan el dolor de manera diferente, la mayoría de las investigaciones sobre el dolor utilizan roedores machos . El nuevo estudio es importante porque, por primera vez, se utilizó tejido de la médula espinal femenina y masculina de ratas y humanos (donado por personas fallecidas y sus familias).
Al examinar el tejido de la médula espinal en el laboratorio, los investigadores pudieron demostrar que un factor de crecimiento neuronal llamado BDNF juega un papel importante en la amplificación de la señalización del dolor de la médula espinal en humanos y ratas macho, pero no en humanos o ratas hembra. Cuando a las ratas hembras se les extirparon los ovarios , la diferencia desapareció, lo que apunta a una conexión hormonal.
Esta es la primera vez que se identifica una diferencia relacionada con el sexo en la señalización del dolor
«El desarrollo de nuevos analgésicos requiere una comprensión detallada de cómo se procesa el dolor a nivel biológico», afirma Annemarie Dedek, de la Universidad de Carleton y The Ottawa Hospital (Canadá) . «Este nuevo descubrimiento sienta las bases para el desarrollo de nuevos tratamientos para ayudar a quienes sufren de dolor crónico».
Esta es la primera vez que se identifica una diferencia relacionada con el sexo en la señalización del dolor en el tejido de la médula espinal humana.
Sin embargo, se requieren estudios futuros para comprender cómo esta diferencia biológica puede contribuir a las diferencias en la sensación de dolor entre hombres y mujeres.