Una mujer policía mata a una pareja de jubilados para robarles y pagar a su hija un viaje a Disney

Sonia Rebeca Soloaga ha sido condenada a cadena perpetua por el doble crimen de Alberto Antonio Chirico y su esposa María Delia Speranza en 2019

Alberto Antonio Chirico y María Delia Speranza

ABC

Una mujer policía fue condenada ayer a cadena perpetua por haber asesinado a un matrimonio de jubilados hace dos años en Parque Avellaneda, Buenos Aires, para robarles entre 70.000 y 80.000 dólares con los que planeaba pagar un viaje a Disney para el cumpleaños de su hija.

Sonia Rebeca Soloaga, de 36 años y es exoficial de la policía de la ciudad, fue condenada como autora del doble crimen de Alberto Antonio Chirico, de 71 años, y su esposa María Delia Speranza, de 63, ocurrido el 11 de junio de 2019. La expareja de Soloaga, el entonces también policía Diego Alberto Pachilla, fue acusado por «encubrimiento agravado».

La vinculación de Soloaga con el asesinato de los Chirico surgió cuando los detectives a cargo del caso, descubrieron que ella era la policía de esa zona y ese mismo día había denunciado que la asaltaron en el barrio cuando circulaba en su coche y que le habían robado una gran cantidad de dinero y su arma reglamentaria.

Al ser detenida reconoció que había mentido y que en realidad se había «olvidado» la pistola y el dinero cuando fue al baño de una estación de servicio.

La fiscalía dio por probado que Soloaga cometió el crimen del matrimonio. «Primero ejerció violencia sobre ambas personas y con unos golpes consigue que le señalen dónde tenían guardada una suma importante de dinero, entre 70 y 80 mil dólares y entre 50 y 60 mil pesos», sostuvo el fiscal. Después, ejecutó a cada uno de los miembros del matrimonio de «un disparo en la cabeza» y para ello utilizó «un almohadón» para «disminuir y amortiguar el ruido».

María Florencia Chirico, hija de las víctimas, declaró que su madre le dijo que «la mujer policía rubia» que solía entrar a la casa para usar el baño o para tomar un café con leche, no le gustaba porque le hacía «preguntas raras» sobre cambio de dólares.

El fiscal indicó que el móvil fue el dinero para pagar una deuda de más de 6.000 dólares que Soloaga tenía con una empresa por un viaje a Disney que le quería regalar a su hija por su cumpleaños de 15.

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