Provincia de cádiz
La provincia de Cádiz empieza a notar las consecuencias de la sequía
Diversos ayuntamientos han suprimido el servicio de duchas en las playas, la producción de algunos alimentos se encarece y sube la cesta de la compra
La provincia de Cádiz tendría asegurado el suministro de agua para uso doméstico hasta 2024
Sequía. Puede ser de las palabras más escuchadas en los últimos meses en la provincia de Cádiz. Un término definido en la Real Academia Española (RAE) como «tiempo seco de larga duración». Desde hace varios años, Cádiz sufre un déficit de precipitaciones, lo que sumado a las altas temperaturas continuas, sobre todo en verano, presentan una estampa preocupante de cara al futuro.
Los embalses de la provincia se encuentran por debajo del 20% y ante la situación existente a día de hoy, los diferentes ayuntamientos de la provincia empiezan a tomar una serie de medidas para paliar la sequía, cuyos efectos empiezan a notar los gaditanos.
El pasado año, en una entrevista en LA VOZ, Ana Bertón, la delegada territorial de Medio Ambiente y Cambio Climático de la Junta aseguraba que la provincia tenía asegurada el suministro de agua para usos domésticos para los próximos dos años, es decir, hasta el 2024. En aquel momento, los embalses estaban por debajo del 30%, un año después ya han bajado del umbral del 20%.
Por lo tanto, en Cádiz no se verán a corto plazo los cortes del suministro que han sufrido los vecinos de algunos municipios de Huelva como Cumbres Mayores, Santa Olalla del Cala o Cañaveral del León.
El único municipio de la provincia que sufrió cortes de agua fue San José del Valle, pero se debieron a unas obras «urgentes», según las llegó a definir el alcalde del pueblo, Antonio González, que permitiera a este municipio tener «una segunda alternativa» al manantial Tempul y canalizar agua del pozo de la Zorrera. Unos cortes que fueron puntuales y que finalizaron hace un par de meses.
Aún así, los efectos de la sequía se están notando en la provincia de Cádiz.
Sin duchas en las playas
El Ayuntamiento de Cádiz fue el último en sumarse a la medida tomada por otro consistorios de la provincia semanas atrás al cerrar las duchas exteriores de la playa, y que entraba en vigor de manera oficial el pasado 14 de agosto, aunque no se ha aplicado ni a los lavapiés ni a los módulos de personas con movilidad reducida, aunque algunos usuarios se han percatado de dicha circunstancia y saltándose las normas y usando la picaresca, han seguido usando las duchas destinadas a personas con movilidad reducida.
«Nuestra intención es que estas medidas sirvan para colaborar en la reducción del consumo de agua y en la concienciación. Esto es un problema de todos que tenemos que resolver entre todos y conseguir que haya un ahorro en el consumo del agua», afirmaba el alcalde la capital, Bruno García, tras el anuncio de la medida. De esta forma, Cádiz se sumaba a otras capitales de provincia de Andalucía como Málaga, que también tomaban la misma medida.
Ya en junio, los ayuntamientos de San Roque, Vejer y Chipiona tomaban la decisión siendo los municipios pioneros en la provincia de Cádiz. En aquel momento, los embalses gaditanos se encontraban al 24% de su capacidad, mientras que en estos momentos están por debajo del 20%.
En otras ciudadescomo en El Puerto sigue habiendo servicio de duchas, pero constantemente suena un mensaje por la megafonía en la playa en la que piden un uso responsable del agua y que no se malgaste.
Los ayuntamientos intentan, de esta forma, hacer frente con sus escasos recursos y con las pocas decisiones efectivas que pueden tomar, a hacer frente a la sequía y reducir en la medida de lo posible el uso de agua.
De cara al futuro, Patricia Cavada, alcaldesa de San Fernando, y Bruno García van a iniciar un camino de colaboración para poder baldear las calles con agua no potable, ya que ambas ciudades comparten una empresa común para la depuración del agua.
Sube la cesta de la compra
El aumento de las temperaturas y la falta de lluvias durante la floración del olivar han provocado que en 2023 haya una escasez de aceite, y por lo tanto suba su precio. No es el único caso, ya que las botellas de agua han subido en el último año un 30% aproximadamente.
En relación al precio del aceite, su precio en algunas distribuidoras ha subido a los nueve euros el litro y en las próximas semanas podría llegar a costar hasta diez euros.
Los productores hablan de que se trata de la peor cosecha del siglo, y el consumo interno habría descendido en un 50% en el primer semestre el presente año. El crecimiento de los precios conlleva una bajada de ventas, del 17% para el aceite virgen extra y hasta un 21% en el caso de las grasas refinadas.
Por otro lado, los alimentos de origen animal también han subido de manera notoria a causa de la sequía. La carne de cerdo se ha encarecido un 19,6% desde el inicio del año 2023, en el caso de los huevos el aumento es del 24,5%, la leche un 30,4% y en el caso de los lácteos del 20,6%.
Por otro lado, la evolución de precios en legumbres y hortalizas ha sido bastante similar en 2023 con un incremento del 27,8% y del 22,8% en los cereales.
Igual ocurre con la fruta y con la verdura. Las restricciones de riego en zonas de máxima producción de la sandía como el Bajo del Guadalquivir (Sevilla y Cádiz) y el Valle del Guadalentín (Almería y Murcia) han restado interés en su cultivo, lo que ha provocado que en los mercados de la provincia apenas haya sandías, y que su precio sea bastante elevado.
Mayor número de incendios
La falta de lluvias deja una estampa de los campos de la provincia totalmente secos, en los que cualquier chispa puede desencadenar un incendio de gran magnitud como el acontecido en Puerto Real, teniendo que emplearse después una gran cantidad de agua para controlarlo y extinguirlo. En apenas una semana, tanto Puerto Real como El Puerto han sido escenario de dos incendios, aunque el de Puerto Real de una mayor dimensión.
En el caso de la localidad puertorrealeña los vecinos denunciaban el mal estado en el que se encontraba el parque de Las Canteras en la zona más próxima a las viviendas. Una zona descampada, con una alta presencia de hierbas secas que prendieron con bastante facilidad e hicieron que el fuego se propagase con facilidad.
Problemas de salud
Los efectos del calor intenso y las exposición a altas temperaturas durante un largo periodo de tiempo son bastante diversos. Desde no conciliar bien el sueño por las noches hasta las enfermedades de piel son solo algunas de las consecuencias para la salud que puede tener la sequía, sobre todo por las temperaturas, que superan en muchos momentos los 40 grados.
Un reciente estudio elaborado por estudiantes de la Universidad de Boston de Estados Unidos reflejaba que las altas temperaturas pueden agravar la ansiedad a las personas con depresión. Por cada grado que sube la temperatura, las muertes relacionadas con la salud mental o la depresión aumentan en un 2,2%, llegando también afectar a personas sin ningún tipo de trastorno bipolar. Por otro lado, dicha universidad demostró que las personas que trabajaban sin aire acondicionado rendían un 13% menos en su puesto de trabajo. El estrés térmico puede provocar náuseas, dolor de cabeza y fatiga. Por ello, todos los expertos inciden en la importancia de una buena hidratación durante el verano