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La Guardia Civil intercepta un barco cuando maniobraba con una narcolancha en el Guadalquivir
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Agentes del Servicio Marítimo de Cádiz sorprenden a los tripulantes de una recreativa que se dirigía a la narcolancha en la desembocadura del río con un motor a bordo. Todos pudieron huir en la 'goma' dejando el barco atrás
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Una de las collas que trabajan para el narcotráfico en la provincia de Cádiz ha sufrido este jueves la pérdida de una embarcación recreativa cuando se disponía a hacer un traspaso a una semirrígida en el río Guadalquivir. El barco en el que tripulaban ha sido intervenido por la Guardia Civil.
Según han informado fuentes de la Benemérita, la interceptación se ha producido esta misma tarde en la desembocadura del río a la altura de Chipiona. Allí, agentes del SIVE daban aviso de que había una semirrígida al pairo y que hacía ella se dirigía otro barco.
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Se dio aviso al Servicio Marítimo Provincial que se dirigió hacia las coordenadas señaladas. Al verlos llegar y aproximarse, los ocupantes de la embarcación emprendían la huida en la narcolancha que no podía ser interceptada.
Por su parte, la embarcación aprehendida, una recreativa de color blanca y unos cinco metros de eslora, con un motor de 150 cv, llevaba en el interior otro motor, siendo trasladada al puerto de Chipiona.
Todo lo ocurrido podría indicar que fueron sorprendidos cuando estaban sirviendo de apoyo mecánico a la narcolancha, una labor a la que también se están dedicando las embarcaciones que llevan cientos de litros de garrafas de gasolina pero que además trasladan también piezas y a menudo ayudan en los cambios de tripulación.
