Gasolineras 'low cost' de Jerez, punto de abastecimiento de las bandas que surten a los narcos

Agentes de la Policía Nacional interceptaban en la noche de este pasado sábado una furgoneta que portaba en su interior 1.250 litros de gasolina en Jerez de la Frontera. Tal cantidad de combustible estaría destinado al abastecimiento y repostaje de las narcolanchas de las organizaciones dedicadas al tráfico de hachís y que operan por toda la costa de Cádiz.

Según ha explicado la Policía en una nota, los agentes identificaron un vehículo sobre las once y media de la noche ante la sospecha fundada de que se estaría cargando combustible de forma ilícita. El vehículo interceptado se trataba de una furgoneta de gran capacidad.

Sus ocupantes fueron identificados y resultaron ser dos vecinos de Chiclana quienes, curiosamente, habían ido a cargar nada menos que medio centenar de garrafas a unos cincuenta kilómetros de su casa. Llevaban 1.250 litros de combustible. Además, los agentes intervinieron otras veinte 'petacas' vacías, que, seguramente, iban a ser llenadas en otras estaciones de servicio cercanas durante esa misma noche.

Por otro lado, el coche no tenía seguro ni tampoco ITV en regla. Ambos individuos fueron traslados a la Comisaría de Jerez, donde tanto el vehículo como el combustible quedó incautado como presuntos objetos del delito. Para ellos, y de momento, habrá sanciones.

Pero a las pocas horas se producía otra intervención muy similar. En este caso era la Guardia Civil quien en una labor de control que está realizando con el apoyo de agentes de la Usecic sobre este asunto, intervino otra furgoneta con 35 garrafas cargadas. Algo más de 700 litros. En este caso los 'petaqueros' eran vecinos de La Línea -estaban a más de cien kilómetros de su casa-, con sanciones pendientes por lo mismo, y uno de ellos, del mes pasado.

Además, también hace poco, se producía otra incautación en otra gasolinera de Jerez, concretamente en la zona norte de la ciudad. Allí en otra estación 'low cost', un vehículo arrastraba un remolque que simulaba estar destinado al transporte de animales vivos pero que, sin embargo, ocultaba en su interior numerosas petacas con gasolina.

Los identificados, uno de ellos menor de edad, eran vecinos de Trebujena. El mayor y conductor en ese momento del vehículo no tenía ni carnet de conducir.

Y así, y tal y como se viene comprobando de un tiempo a esta parte, las collas que se dedican a suministrar gasolina a los narcos, se abastecen a diario en este tipo de estaciones de servicio, donde no suele haber personal, o éste no permanece junto a los surtidores de manera continua.

Según fuentes consultadas, el mismo auge y proliferación de este tipo de gasolineras de autoservicio ha incrementado también el número de personas y grupos que se dedican a llenar las petacas con fines ilícitos, como para las embarcaciones de los narcos que necesitan repostar a menudo al permanecer en alta mar y realizar sus alijos.

Además, se ha comprobado que estas redes de 'petaqueros' llegan a subcontratar a jóvenes -algunos de ellos menores- que por unos 20 euros al día les llenan las garrafas en diferentes estaciones de servicio. Pueden ir cada día o varias veces a llenarlas. Y así y sumando van almacenando en las 'guarderías' (casas, fincas, naves...) y una vez que tienen las suficientes, las cargan en una furgoneta, botan el barco y con GPS de navegación y demás métodos habituales llegan hasta un punto acordado o hasta la narcolancha o narcolanchas que tengan como 'clientes'.