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Fallece un niño jerezano ahogado en la piscina de un centro de menores
La muerte se produjo el mismo día en que su madre recuperó la custodia
Actualizado: GuardarEl viernes comenzó siendo un buen día. El juzgado le notificó que había recuperado la custodia de sus hijos, de 12 y 13 años, ambos ingresados en dos centros de menores, uno en Cádiz y otro en Málaga. Pero la euforia se tornó pesadilla. A las ocho de la tarde, le comunicaron que su hijo Agustín, el pequeño, había fallecido.
Es difícil comprender la dimensión del drama. «Me quedé de piedra, tiré el móvil al suelo y empecé a chillar.», cuenta Rocío Ávila, que vive en Jerez de la Frontera (Cádiz). «Imagínese. Llevo más de cinco años luchando por recuperar a mis hijos hasta que por fin lo consigo y, ese mismo día, se me muere».
El pequeño Agustín, que en septiembre habría cumplido 13 años, se encontraba el viernes por la tarde tomando un baño en la piscina del Instituto Psicopedagógico Dulce Nombre de María, en la localidad malagueña de Pedregalejo, donde estaba internado. Al terminar las actividades, vigiladas por varios educadores -según el centro-, un alumno se percató de que el menor yacía inmóvil en el fondo de la piscina. Los intentos de reanimarle fueron en vano.
Informe definitivo
El juzgado de instrucción número 4 de Málaga tiene abiertas diligencias previas sobre el caso, que está pendiente del informe forense definitivo. Al parecer, se han encontrado indicios internos de ahogamiento, aunque se investiga si concurrieron otras circunstancias previas que desembocaron en un desvanecimiento o una pérdida de conocimiento.
Mientras, Rocío se deshace en preguntas. «Aún no sé qué ha pasado. Nadie me dice nada, y yo necesito saber de qué ha muerto», asevera la madre. Son muchas las cábalas que se hacen sobre el suceso. Rocío asegura que su hijo se defendía en el agua, pero no que sabía nadar perfectamente, como apuntaron desde el centro donde se produjo el deceso. Agustín llevaba poco más de un año en el centro. Se había integrado en el instituto, donde su madre afirma que lo trataban bien. Según explica Juan Manuel Delgado, abogado de Rocío, ella perdió la custodia de los menores -se la dieron a los abuelos paternos- por una denuncia de supuestos malos tratos.