«Alfonso X no dedicaba toda su vida a gobernar, también se divertía»
El director de la Semana de Estudios Alfonsíes afirma que, tras la consolidación de las jornadas, en esta edición abordan aspectos más lúdicos
Actualizado:La palabra «satisfacción» no era lo único que rondaba por la cabeza de Manuel González Jiménez hace ya dos años durante la clausura de la V Semana de Estudios Alfonsíes que dirige. La idea de explicar al mundo las aficciones lúdicas y más divertidas del llamado Rey Sabio eran por entonces sólo un pensamiento que desde ayer se hizo realidad.
Bajo el título de Diversiones, juegos y magia en la Corte de Alfonso X, ayer se inauguraron estas jornadas históricas que, hasta mañana, analizarán uno de los aspectos más desconocidos de aquella gran corte medieval.
-Al concluir la pasada edición de las jornadas de Estudios Alfonsíes la calificó como «clave para la consolidación de la cátedra». ¿Cómo afrontan esta nueva convocatoria?
-Sin duda, la pasada edición fue importante, sobre todo porque nos situó en una fase de madurez y consolidación que ha conseguido que la Semana de Estudios Alfonsíes forme parte del panorama cultural del Puerto. La IV Semana también fue importante porque la cátedra ya contaba con sede propia y porque nuestra revista, Alcanate, se afianzó dentro de las publicaciones históricas como una revista especializada no sólo en la Edad Media, sino en la figura de Alfonso X. Así, en esta nueva edición ya gozamos de plena madurez y entramos en la rutina habitual de El Puerto, algo que provoca que el público nos conozca y se acerque a participar.
-¿Qué objetivos se han planteado cumplir en esta V Semana?
-Hemos cambiado un poco la temática. En otras ediciones hemos tratado temas muy históricos, como las relaciones de Alfonso X con las órdenes militares, con el Puerto a través de las cantigas a Santa María del Puerto... En esta ocasión, sin dejar de hacer Historia, hemos entrado en un tema que he querido tratar desde hace tiempo, aunque no me atrevía por parecerme un poco de curso de verano, aunque realmente no lo es. Se trata de abordar la vida cotidiana de una corte medieval, la de Alfonso X, así como sus aficiones y las de su tiempo. El rey no dedicaba toda su vida a gobernar, también se divertía.
Entretenimiento
-¿En qué se basaban las distracciones en tiempos de Alfonso X?
-En la poesía, la música, la caza... Alfonso X usaba la poesía a través de las cantigas como medio de expresión, ya fuese de temas religiosos como profanos, que en algunas ocasiones llegaban a ser hasta irreverentes y antirreligiosos. En cuanto a la música, siempre ha estado asociada a las cantigas en la corte castellana. En el caso de la caza, todos los reyes medievales fueron grandes cazadores. Alfonso X veía la caza, no sólo como un deporte para estar en forma para la guerra, sino también para quitarse de encima la saña, el rencor, el odio tan propio de los gobernantes.
-En el caso de juegos como el ajedrez, ¿cómo llegan a la corte ?
-El ajedrez o los dados llegan hasta la corte a través de libros que Alfonso X manda traducir de textos árabes. Son juegos intelectuales que usarán para olvidarse un poco de los agobios de gobernar.
-Una de las conferencias estará dedicada a La obra astromágica de Alfonso X. ¿Qué influencia tenía la magia y la astrología en el rey?
-Sobre todo eran muy supersticiosos, creían en la influencia de los astros en las cosas que les habían pasado y los reyes solían hacer cálculos de la posición de los astros para preparar sus próximos movimientos, es decir, usaban la astrología sobre todo para predecir el futuro. También se abordará el tema de las piedras preciosas, en cuanto a su estudio y valor, que trata el Lapidario de Alfonso X.
-¿Cree que al tratar temas más libianos que en otras ediciones atraerán a más público de a pie?
-Puede ser, porque de estos aspectos no se suele hablar en los congresos y jornadas históricas, aunque se sepa de su existencia y sean unas bastante atractivos.
-¿Tienen ya alguna idea sobre la temática que centrará las próximas Semanas Alfonsíes?
-No exactamente. El tema de Alfonso X tiene un material inagotable y hay que andar con mucho cuidado al tratarlo para no banalizarle ni él ni a la Historia. La idea que de momento ronda para las VI Semanas es que Alfonso X mandó escribir dos grandes libros de Historia que a su vez estaban llenas de pequeñas narraciones. Entre ellas, hay reducidos aspectos que quedaron recogidos, pero que nunca ocurrieron, leyendas básicamente, pero que se tomaron por ciertas. Sería interesante analizar su origen y ver cómo llegaron hasta Alfonso X y por qué se plasmaron en sus publicaciones.