EE UU negocia medidas contra Irán que no perjudiquen a la población
Washington pedirá al Consejo de Seguridad que congele los fondos internacionales del régimen de los ayatolás El Gobierno Bush presentará su propuesta a Rusia el martes
Actualizado:El Departamento de Estado estadounidense adelantó el viernes el siguiente paso en la estrategia de presión a Irán, que pasa por obtener del Consejo de Seguridad de la ONU una resolución de condena en la que se ordene la congelación de sus divisas internacionales y se limite la emisión de visados para su Gobierno. Washington negocia ya estas medidas con los otros cuatro miembros permanentes con derecho a veto -Rusia, China, Reino Unido y Francia-, pero planea una ofensiva diplomática el martes en Moscú. Allí, en casa del mayor opositor para su política de acoso global a Teherán, el subsecretario de Estado para Asuntos Políticos, Nick Burns, intentará allanar el camino para la adopción de lo que llama «acciones reales» de condena al enriquecimiento de uranio que persigue el régimen de los ayatolás.
El Gobierno de Ahmadineyad dice no tener intención de utilizar esa energía para armas nucleares, e incluso EE UU admite que le faltan al menos cinco años para desarrollar la tecnología necesaria. En ese contexto, Moscú se resiste a desatar las iras de su aliado comercial mientras no haya «evidencias de que no estén cumpliendo con el tratado de no proliferación», dijo el embajador ruso en la ONU, Andrei Denisov esta semana.
El portavoz del Departamento de Estado, Sean McCormack, admitió que su Gobierno cuenta con que «los rusos tengan su propio punto de vista» y llegará a la reunión con ánimos de escucharlo. En esta oposición al frente anglosajón, al que se ha unido Francia y Alemania, Moscú cuenta con el apoyo de China.
La adopción de sanciones contra el país persa que no pasen por el embargo coincide con el ánimo del exilio iraní en EE UU, que sólo en California se acerca al millón de personas. Pese a su oposición al régimen actual, los iraníes no apoyan la adopción de medidas que hagan sufrir a su pueblo. Washington cuenta con que esto facilite la adhesión de las potencias reticentes para poder obtener su apoyo tan pronto como Mohamed Al-Baradei, jefe de la Agencia Internacional de Energía Atómica, presente su informe el próximo día 28.
Ímpetu
McCormack condenó el jueves los nuevos pronunciamientos antisemitas del presidente Mahmoud Ahmadineyad, sin ocultar cierta complacencia. «Esta clase de retórica, que sólo podemos asumir, representa las verdaderas intenciones políticas del régimen iraní, proveerán de ímpetu a la comunidad internacional para actuar enérgicamente, de manera diplomática, para forzar a Teherán a cambiar de actitud», observó.