Pittsburgh celebra la Super Bowl y en Seattle siguen criticando a los árbitros
Desafiando el frío, los seguidores de los Steelers dieron un gran recibimiento a los campeones
Actualizado: GuardarLos efectos de la disputa de la XL edición de la Super Bowl siguen. Después de que los seguidores de los Pittsburgh Steelers celebraran su triunfo, en Seattle, los de los Seahawks continuaban hablando de "robo" por parte de los árbitros.
Los Steelers, que el pasado domingo consiguieron el quinto título de Super Bowl después de ganar 21-10 a los Seahawks, fueron recibidos por miles de seguidores que colapsaron el centro de la ciudad para asistir a un desfile en su honor.
Desafiando el frío, los seguidores de los Steelers dieron el gran recibimiento a los jugadores con pancartas en las que entre otras expresiones estaban las de "Gracias, Quinto Título" o "Sois Auténticos Campeones".
Los seguidores de los Steelers no tuvieron problemas para celebrar bajo la nieve ni las temperaturas que rondaban los 4 grados centígrados bajo cero. Algunos mostraban carteles con la fotografía del fundador de los Steelers, Art Rooney, junto a la leyenda "Nosotros Recordamos". Otros portaban sombreros con los colores del equipo, negro y dorado.
El entrenador del equipo de Pittsburgh, Bill Cowher, y los jugadores, vestidos de campeones de Super Bowl, desfilaron lentamente con el corredor Jerome Bettis, sentado en un convertible con la capota baja, llevando el trofeo de Vince Lombardi.
Una multitud abarrotó la ruta del desfile, de 1,6 kilómetros de largo. Barcos de turismo apiñados transportaron hinchas vestidos con prendas relacionas al uniforme de los Steelers.
"Estuve aquí con ustedes en la década de los setenta y todo lo que escuchábamos era lo bien que se sentía haber ganado cuatro títulos", manifestó Cowher. "Todo lo que puedo decir ahora es que me siento mucho mejor porque participo del triunfo". El mariscal de campo de los Steelers, Ben Roethlisberger, también quiso definir el estado emocional de todos cuando dijo que lo que estaban viviendo era un sueño hecho realidad.
El alcalde de Pittsburgh, Bob O'Connor, también se sumó al desfile, con una casaca blanca de Bettis y hasta el gobernador de Pensilvania, Ed Rendell, un demócrata, seguidor acérrimo de las Aguilas de Filadelfia, el equipo rival de los Steelers, estuvo presente en la celebración.
La cruz, en Seattle
Mientras, en Seattle, desde el entrenador del equipo de los Seahawks, Mike Holmgren, hasta el mariscal de campo Matt Hasselbeck, siguen insistiendo en que los árbitros provocaron la derrota de su equipo. "Esas cosas están fuera de nuestro control", dijo Hasselbeck. "Es decepcionante, es duro, pero ¿qué puedes hacer?".
Los aficionados de los Seahawks junto con algunos jugadores van mucho más lejos y aseguran que todo estaba planificado para que los Steelers ganasen el título y que Bettis pudiese retirarse en plan campeón.
La oficina de la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL) no ha querido hacer ningún comentario al respecto, pero la imagen de los árbitros y de la liga no está quedando nada bien cuando la realidad es que su actuación fue más que "cuestionable", porque tuvieron graves equivocaciones y todas fueron favorables a los Steelers.
Inclusive todavía no han podido aclarar cómo dieron por buena la primera anotación del mariscal Roethlisberger cuando las imágenes son clarísimas y muestran que nunca pasó la línea con la pelota hasta después de estar ya en el suelo.
Los jugadores de los Seahawks admiten que podrían haber hecho más por sobreponerse a las decisiones erróneas de los árbitros, pero su argumento es que siempre les impidieron anotar los puntos que hubiesen sido decisivos y tampoco les dejaron jugar.
De lo que no hay tampoco ninguna duda es que el partido más importante del año, los mayores protagonistas fueron los árbitros y de ahí que, mientras en Pittsburgh celebran un título histórico, en Seattle siguen las críticas.