Vanguardia marinera
Un sencillo y acogedor hotel situado en el centro de Barbate es el lugar ideal para buscar el sol de la playa y la tranquilidad de los pinares
Actualizado:S u nombre, de origen árabe, significa hospitalidad y esto es lo que se ha tratado de buscar en este sencillo hotel nuevo que se inauguró el pasado julio. El establecimiento está situado en pleno casco urbano de Barbate, junto al Paseo Marítimo y al centro del municipio, donde se encuentran la mayoría de comercios y lugares de interés.
El hotel Adiafa destaca por su arquitectura moderna donde destaca, sobre todo, el color blanco mezclado con materiales como el acero, el cristal o el mármol. A esto se une la impresionante luminosidad con la que cuenta el edificio, construido en forma de patio interior acristalado sobre el que miran largos pasillos donde se encuentran las habitaciones. Tampoco la luz es un elemento carente en éstas, ya que, la mayoría cuentan con un enorme balcón que deja entrar el típico sol luminoso de la costa. En palabras de Francisco Posado, propietario del establecimiento «queríamos que el hotel tuviera mucha luz y fuera muy amplio para que transmitiera una sensación de tranquilidad que permitiera a los clientes descansar, no queríamos que fuera nada lúgubre».
Otra característica de este alojamiento es la decoración, escasa pero bien dispuesta con un estilo moderno y minimalista donde abundan los detalles y los colores blanco, negro y rojo. Las paredes blancas se mezclan con peces forjados de acero y tabiques de colores fuerte con poca ornamentación. «La decoración está inspirada en los profundos fondos marinos, esto es así porque buscábamos impregnar en el edificio el carácter marinero de Barbate pero sin caer en los típicos símbolos de la red y el ancla, nuestro propósito era conseguir algo más original» comenta Francisco.
Instalaciones
En cuanto a las habitaciones, el hotel cuenta con 19 estancias equipadas con baño completo, calefacción y televisión por satélite, algunas incluso tienen jacuzzi como la llamada «júnior suite» que, además de ser un poco más grande que las demás, cuanta con un gran sofá y una mesita a modo de saloncito.
Pero una de las principales ventajas del hotel es su situación en el municipio, ya que, desde sus balcones se ve perfectamente la Playa del Carmen y tiene muy fácil accesibilidad. Esto es una ventaja al no disponer de restaurante, aunque sí de una acogedora cafetería abierta al público donde se respira el mismo aire vanguardista y tranquilo que en el hotel. Un detalle muy simpático de ésta es que con el café o zumo regalan un delicioso pastel en miniatura por lo que se convierte en un lugar de referencia no sólo para dormir sino para pasar una agradable tarde.