Judith Obaya, la motera que se cruzó el Sahara de arriba a abajo… y vuelta

Atravesar el desierto Sahara en moto sin asistencia no es algo de lo que puedan presumir demasiadas personas, y menos aún mujeres. Judith Obaya es una de ellas, y ha completado la aventura Sahara Crossing.

Tras 10 días de ruta y 3.200 km de circulación offroad por el desierto, el pasado 13 de mayo logró atravesar el Sáhara Occidental, de norte a sur, y de sur a norte, en motocicleta.

Sin contar con apoyo externo, atravesó los difíciles terrenos desérticos de piedra y arena con un equipo básico a bordo. La ruta discurrió siguiendo antiguas pistas del Rally Dakar, sendas militares, caminos de pastores y tramos fuera de pista, entre ellos dificultades como cauces de ríos como el Oued Todga, donde tuvo que desmontar maletas y equipaje para llegar al otro lado.

Cuenta Obaya que la travesía norte-sur se complicó en la última etapa, cuando quedó atrapada en un círculo de dunas móviles o Barkhanes. La experiencia de su compañero de travesía y el corage de la aventurera les permitió avanzar hasta bien entrada la noche, cuando logró salir del atolladero. Pese a las dificultades, el calor, la limitada alimentación y el esfuerzo de dirigir maquinas tan pesadas y cargadas sobre ese tipo de terrenos, el resultado ha sido más que satisfactorio.

Los viajes a lugares de pasado bélico se suman en casos así a las complicaciones orográficas, por lo que solo pilotos de gran fortaleza física y psicológica pueden llevarlos a cabo. Deben sumar conocimientos de navegación y orientación en lugares aislados carentes de referencias, con preparación para actuar en caso de avería, accidente o enfermedad. Además, es clave disponer de la logística necesaria para emergencias.

Obaya tiene 48 años, es madre y trabaja a turnos, por lo que no le resulta fácil emprender este tipo de aventuras. Sin embargo, la asturiana ha completado la Sahara Crossing TA al frente del Motorcycle-Experiences Team.