El coche de Roberto Bautista: «En mi garaje puedes encontrar hasta un tractor»
El tenista español se considera un apasionado de los coches «desde siempre. Es una pasión que compartía con mi padre y con mi abuelo. Se podría decir que mi gran afición son los caballos (y no solo los de mi yeguada)», subraya entre risas
El tenista castellonense Roberto Bautista de 32 años y duodécimo del ranking mundial, lleva desde los cinco años disfrutando junto a su fiel compañera, la raqueta. Fue «amor» a primera vista, desde que en ese instante sus padres le llevaron al Club de Tenis de su pueblo Benlloch.
El campeón de la Copa Davis en 2019, con 9 títulos ATP y diploma olímpico en Río 2016, que también tenía como pasión el fútbol, no se arrepiente de la decisión que tomó de dejarlo a los 12 años para dedicarse por completo al tenis . Aunque el fútbol, o sus caballos, son dos aficiones de las que disfruta en su tiempo libre, además de estar en casa con su familia. Y es que Bautista se considera una persona muy casera y de campo . Es decir, durante una entrevista con este periódico, detalla que en su garaje puedes encontrar «un coche, la bici de montaña (para volver a recorrer los pueblecitos de mi zona) e incluso un... ¡tractor! Me gusta mucho el campo».
Se considera un apasionado de los coches «desde siempre». «Es una pasión que compartía con mi padre y con mi abuelo. Se podría decir que mi gran afición son los caballos (y no solo los de mi yeguada)», subraya entre risas.
Actualmente conduce un Lexus NX300h , un híbrido que «combina todos los aspectos que necesito a diario, es decir, por ciudad apenas contamina y es muy fácil de conducir, así como que tiene una estética deportiva y mucha capacidad», manifiesta. Es más, para él, a la hora de elegir un coche no prima más la estética, ni la mecánica o las emisiones, »es la combinación de todo«. »Si hay coches que te lo ofrecen todo, ¿por que dudarlo?«, añade. De hecho, con Bautista podemos confirmar que el coche dice mucho de su dueño, ya que »si se hace una buena elección«, será como tu media naranja.
El tenista recuerda sus inicios con nostalgia . Tan pronto se sacó el carné de conducir, «nada más cumplir los 18 años mientras estudiaba el último curso en el instituto», comenzó a viajar en un Opel Corsa que le dejaba su madre, un modelo que guarda varios secretos, aunque prefiere mantenerlos «aún como inconfesables...». Y como no, su primer trayecto largo fue a «Pozoblanco, a jugar un challenge». Dos de sus mayores pasiones juntas.
Bautista reconoce también en la entrevista que le gusta la conducción, y que se decanta siempre por manejar el vehículo , aunque en las ocasiones en las que va de copiloto no molesta con las indicaciones. Entre las muchas funcionalidades del NX 300h, asegura que el asistente de aparcamiento es una de las mejores, aunque en su caso no lo utiliza mucho ya que suele aparcar su híbrido a la primera.
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