Renault acaba de dar a conocer un nuevo propulsor diésel. De momento, solo anuncia que se trata de un motor muy eficaz, ideal para modelos de grandes dimensiones y que equipará a los futuros turismos de los segmentos D y E, esto es, a partir del tamaño del Fluence o el Laguna.

La marca sigue la tendencia actual de motores pequeños y compactos. En este caso cuenta con una cilindrada de 1.598cm3, desarrolla una potencia de 160 caballos y un par motor de 380 Nm que proporciona las prestaciones de propulsor mayor. Son cifras propias de un bloque de dos litros pero combinado con un consumo y unas emisiones de CO2 reducidas en un 25 %.

Para Renault, se trata del primer motor diésel dotado de una doble sobrealimentación. La tecnología «Twin Turbo» permite mejorar la respuesta en todo el margen de revoluciones utilizable, tanto con una buena respuesta a bajo régimen como en la parte alta del cuentarrevoluciones, lo que mejora el confort de conducción.

De los dos turbocompresores, el primero es más pequeño y con muy poca inercia. El objetivo es mejorar el arranque y la recuperación desde bajas vueltas; el 90 % del par se alcanza desde solo 1.500 revoluciones por minuto lo que se debe traducir en una respuesta inmediata al acelerador incluso en marchas largas. El segundo turbo es más "responsable" de que el motor siga respondiendo con brío en los regímenes más altos.

Renault suele aplicar la experiencia en competición para el uso diario y este motor no ha sido una excepción. El bloque Energy dCi 160 Twin Turbo se beneficia de algunos elementos empleados en los distintos motores de la fórmula 1 (la marca del rombo no solo equipa al coche de Vettel), como todo lo que referente a la refrigeración y además se traslada la forma en que se produce un menor rozamiento interno.

El nuevo motor también hereda de la fórmula 1 el sistema de circulación de agua transversal que consigue una refrigeración rápida y eficaz de la cámara de combustión, los segmentos con geometría en forma de U y las superficies con elementos en carbono. Todo ello en beneficio de unas mejores prestaciones y sobre todo una mayor longevidad, como se viene demostrando en todo el campeonato.

El motor 1.6 Energy dCi 160 Twin Turbo adopta un sistema de inyección con una presión de 1.800 bar, necesaria por el doble turbocompresor. Respeta los criterios de la norma anticontaminación Euro 6b, que incluye una Nox Trap y un sistema de regeneración del filtro de partículas.