El conocido fabricante germano ya tiene preparado su nuevo 911 GT3 R para la temporada de este año. Basado en la generación 997, esta versión 2013 incorpora numerosas modificaciones. La carrocería es ahora más espectacular, con unas aletas delanteras y traseras más anchas, el alerón trasero es mucho mayor y en definitiva ofrece un aspecto más musculoso que su antecesor.
La nueva aerodinámica genera bastante más carga vertical, lo que permite un paso por curva rápida a más velocidad y es posible apurar más la frenada. La mayor anchura de los ejes y los neumáticos de mayor tamaño mejoran la tracción.
Porsche Motorsport ha hecho un laborioso trabajo para conseguir una mejora en la aerodinámica. Los paneles de los paragolpes delanteros, las aletas, los perfiles que cubren el umbral del habitáculo, el panel trasero y los bajos de la carrocería, junto con el difusor posterior, han sido afinados a fondo en el túnel de viento. El alerón trasero ha sido alargado a lo ancho del coche y reposicionado para trabajar de forma óptima con la rediseñada carrocería.
La suspensión también varía en la nueva versión del GT3. Es debido a las nuevas dimensiones de la carrocería, con una batalla que crece diez milímetros y las vías, tanto las delanteras como las posteriores, son 50 milímetros más grandes. La anchura de las llantas delanteras es ahora de 12 pulgadas en lugar de las 10,9 del modelo precedente. Apenas hay cambios en el conocido motor bóxer de seis cilindros y cuatro litros que desarrolla una potencia de 500 caballos.
La caja de cambios secuencial Porsche de seis velocidades y dientes rectos se acciona mediante un sistema neumático a través de las levas del volante. Esta solución técnica permite cambios de marcha muy suaves y rápidos, una ventaja cuando se trata de realizar la operación con seguridad y alargar la vida útil de la mecánica.
Todo un complejo sistema electrónico de ayuda a la conducción contribuye a una mayor efectividad en carrera y a evitar pasar de vueltas el motor. Así, el acelerador electrónico cuenta con una función de corte automático en el momento del cambio de marcha. La electrónica de la caja de cambios se ocupa del salto entre una y otra marcha e impide que el motor gire por encima del corte de inyección.
Gracias a un control de tracción y a un ABS de competición especialmente calibrados, el 911 GT3 R puede ser conducido al límite con más facilidad, tanto en frenada como en aceleración y en curva.
Mediante un kit de conversión que ofrece el fabricante, se pueden transformar los GT3 R de otros años a las especificaciones 2013. Porsche Motorsport lo comercializa a un precio de 45.500 euros, al que hay que añadir los impuestos correspondientes de cada país.
