El nuevo cabrio de Opel ya tiene nombre: Cascada. Como en los últimos modelos de la marca se mantiene misma tendencia en que todos los nombres acaben en “a”. Y también, y como suele ser habitual en la mayoría de los fabricantes, si se busca una justificación en el porqué del término utilizado, en este caso es sinónimo de rítmica, dinámica y fluida, belleza, frescura y puro placer de conducir al aire libre.
Con el Cascada, y tras el Mokka y el Adam, Opel ha dado a conocer tres nuevos modelos este año. Un importante esfuerzo de la marca en la evolución de su gama de productos y en tres nuevos segmentos tan diferentes con el de los SUV compactos, el de los pequeños vehículos urbanos y el de los descapotables de tamaño medio.
Con una carrocería de 4,70 metros de longitud, el nuevo modelo descapotable de Opel viene a competir en el segmento de cabrios. En este sentido, el Cascada recuerda más a las clásicas versiones descapotables Opel de los años cincuenta y sesenta, como el Kapitän o el Rekord, que a los cabrios compactos de las dos últimas décadas.
Aunque el nuevo modelo se pone a la venta en las primeras semanas de 2013, Opel solo ha querido enseñar una pequeña parte. Sí anuncia que combina un aspecto musculoso y una silueta alargada con unas proporciones equilibradas. Su capota blanda subraya la elegancia y refinamiento del coche. Se acciona de forma automática, incluso circulando a una velocidad de hasta 50 km/h.
El nuevo Opel Cascada se pondrá a la venta a principios de 2013. Su presentación se retrasa hasta después del Salón de París, donde se dará a conocer el nuevo Opel Adam.
