La oferta de Opel en cuanto a modelos con una menor emisión de gases contaminantes empieza a crecer. Ahora, lanza al mercado una amplia gama de vehículos con GLP (Gases Licuados del Petróleo) desarrollados por el fabricante y que cuentan con la misma garantía que la de sus hermanos de gasolina y diésel.
Para la marca alemana, este tipo de motorización va dirigida principalmente a profesionales y empresas. La gama de modelos Opel con funcionamiento a base de gas se centra en los vehículos de mayor volumen, como el Corsa en tres y cinco puertas, Meriva, Astra cinco puertas y Sports Tourer, Zafira Tourer y también en el automóvil más significativo, el Insignia en variantes Sedán y Sports Tourer.
Frente a otros combustibles, el gas ofrece ventajas económicas, de autonomía y medio ambientales para el vehículo. Su precio permite la amortización a corto plazo de la diferencia de coste del equipo GLP en el vehículo. El también conocido como Autogas (GLP de automoción) es aproximadamente un 50 % más barato que la gasolina, lo que supone un ahorro entre 1,5 y dos euros por cada 100 kilómetros recorridos.
Actualmente, se ha convertido en el carburante más económico del mercado gracias a sus ventajas fiscales. El actual impuesto de matriculación favorece a los vehículos más ecológicos (con emisiones de CO2 más bajas). La cuantía del descuento asociado al Programa PIVE2 para el beneficiario será de 2.000 euros como mínimo y hasta alcanzar los 3.000 euros en el caso de familias numerosas.
Respecto a un vehículo con el mismo motor de gasolina, la utilización de GLP significa una rebaja de aproximadamente un 40 % en costes de combustible. Además, el mantenimiento de los motores es más económico debido a las menores averías y la mayor longevidad por un desgaste muy poco representativo. La combustión no deja residuos y además se emplean unas válvulas especialmente reforzadas.
El funcionamiento del motor es silencioso y suave y el vehículo dispone de mayor autonomía, que se cifra en más de 1.400 kilómetros si se añade con la gasolina. El sistema de GLP está muy bien integrado en el vehículo con el depósito de combustible para el gas ubicado justo en el espacio para la rueda de repuesto.
Menos emisiones contaminantes
Además, los vehículos propulsados por GLP contribuyen a reducir la contaminación en nuestras ciudades, principalmente por las emisiones de NOx que son hasta un 80 % inferiores respecto al diésel; la emisión de partículas es mínima y con menores niveles de ruido. Las emisiones de CO2 son comparables a las de los vehículos diésel, y hasta un 15 % más bajas que los de gasolina.
La apertura de más de 200 estaciones de servicio con surtidores de GLP, hacen que el gas empiece a ser una alternativa más que interesante para varios colectivos, como autónomos, empresas, autoescuelas o ayuntamientos, por citar las más representativas. Así mismo, se espera que pronto puedan interesarse por este combustible alternativo clientes particulares que realicen gran cantidad de kilómetros al año.
La fábrica de Figueruelas (Zaragoza) instala en el propio proceso de manufactura el equipo de GLP en el Corsa y en el Meriva, los dos modelos que fabrica en España, con ingeniería hecha por los ingenieros de la planta.
En este tipo de vehículos es muy importante llevar a cabo el programa de mantenimiento de las motorizaciones en tiempo y forma acorde a las instrucciones del fabricante. Se debe de tener en cuenta los intervalos legales establecidos para la inspección técnica del sistema GLP y sus componentes. Por ello, Opel está llevando a cabo una formación técnica específica para los técnicos de taller y los equipos de posventa que se ha desarrollado como apoyo al lanzamiento de la gama de vehículos con GLP.
Opel ha realizado un esfuerzo por posicionar adecuadamente en precio la oferta de todas sus versiones de GLP, que se comercializarán al mismo precio que las motorizaciones diésel más vendidas de cada modelo.
