Importantes novedades de Citroën en el Salón de Fráncfort. La marca se presenta con el objetivo principal de renovar las gamas C y DS. Lo hace como anticipo con el concept Cactus, un prototipo de los futuros modelos de la línea C. Además va a mejorar los distintos equipamientos de los vehículos y avanzará el nuevo programa deportivo en competición con el Campeonato del Mundo de Turismos FIA WTCC.
En la muestra germana será novedad la gama DS con el acabado Faubourg Addict, en clara alusión a la conocida calle parisina. Se equipará en exclusiva en los DS3, DS3 Cabrio, DS4 y DS5. Desde 2010, esta línea de modelos lleva vendidos más de 360.000 unidades, de las cuales un 66 % corresponden a nuevos clientes de la marca.
También se presentan en Fráncfort el DS3 Cabrio Racing y por primera vez en Europa el Wild Rubis, dos concept car que confirman la audacia creativa de esta línea de productos con una fuerte personalidad. La línea DS abre una nueva fase en su internacionalización con la producción del DS5 en China, en la fábrica de Shenzhen, destinada al mercado local.
Tras la renovación que ha supuesto el lanzamiento del C4 Picasso, del que ya se han vendido 10.000 unidades, Citroën prosigue su ofensiva tecnológica con innovaciones como la nueva plataforma modular del grupo PSA, que se estrena en los nuevos C4 Picasso y Grand C4 Picasso. La mejora en la eficiencia es evidente y una de las versiones destaca con unas emisiones de solo 98 g/km de CO2.
En el apartado diésel, se traduce también en una oferta de motores cada vez más eficientes como los nuevos BlueHDi, que incorporan la tecnología más eficaz para tratar los perjudiciales óxidos NOx reduciendo al mismo tiempo las emisiones de CO2. Estos propulsores ya cumplen la normativa Euro VI. Según países, la versión de 150 CV está presente en los nuevos C4 Picasso y Grand C4 Picasso, mientras que la de 180 caballos se suma a la gama de motorizaciones del DS5.
La ofensiva tecnológica llega también a la familia de motorizaciones de gasolina Puretech, con un propulsor turbo en el Citroën C4. Además destaca la propuesta de nuevas soluciones para la mejora del medioambiente, como el caso del HybridAir, que asocia el aire comprimido y la gasolina como una novedosa tecnología híbrida de la marca.
Por último, la demostración de la renovación deportiva de Citroën es la presentación del C-Elysée WTCC que estará en la línea de salida del Campeonato del Mundo de Turismos de la FIA en 2014, con dos pilotos de excepción: Sebastien Loeb e Yvan Muller. Un nuevo reto y un desafío tecnológico para el fabricante de ocho títulos de campeón del mundo de constructores de rallies.