Gracias al original diseño de sus líneas y a su innovador sistema de propulsión, el BMW i8 es el pionero de una nueva generación de coches deportivos híbrido-eléctrico enchufables. El nuevo i8 es el primer coche de elevadas prestaciones del mundo desarrollado desde un principio de acuerdo a rigurosos criterios de sostenibilidad medioambiental. Tanto el exterior como el interior de este deportivo “ecológico”, reflejan lo que la marca alemana define como “el nuevo placer de conducir”. Con un interior futurista y capaz de albergar a cuatro personas, la “jaula” del habitáculo del i8 está reforzada con fibra de carbono y elementos de absorción de impactos y componentes estructurales integrados de aluminio, por citar un par de ejemplos de su extensa panoplia de elementos tecnológicos de vanguardia.
La carrocería tiene las proporciones clásicas de un auténtico deportivo, con un centro de gravedad muy bajo (un poco inferior a medio metro) y una altura de apenas 1,30 metros, destacando especialmente en el conjunto las visualmente espectaculares puertas basculantes tipo “alas de gaviota” y los faros de rayos láser montados por primera vez en un automóvil fabricado en serie. El nuevo i8 es un deportivo “ecológico”, no un coche en el que la búsqueda del ahorro en los consumos y coste de uso (aunque gaste muy poco) sea un factor primordial de compra, ya que tiene un precio de salida de 129.900 euros. Una cantidad al alcance de muy pocos potenciales compradores, con una gran solvencia financiera y ¿por qué no?, alguno habrá, con una enorme, casi desmesurada conciencia ecológica.
El concepto integral de sostenibilidad medioambiental, se refuerza con el sistema propulsor híbrido eléctrico enchufable, que combina un motor de gasolina de tres cilindros con tecnología BMW de doble turbo y un motor eléctrico. Este grupo tiene 1,5 litros de cilindrada y una potencia de 231 caballos, con un par motor máximo de 320 newton-metro; el motor eléctrico rinde 131 caballos y un par máximo de 250 n-m. La transmisión de la potencia se efectúa hacia las ruedas delanteras a través de una caja automática de dos marchas, mientras que la potencia llega a las traseras mediante una caja de cambios automática de seis marchas, lo que combinado hace del i8 un auténtico “cuatro ruedas motrices”.
La unión de ambos tipos de propulsión, consigue obtener una potencia máxima combinada de todo el sistema de 362 caballos. Por lo tanto, un rendimiento acorde al de un coche deportivo de pura sangre que acelera de 0 a 100 km/h en tan solo 4,4 segundos (cifra a la altura de algunos Porsche y Lamborghini). Sin embargo, los consumos y las emisiones de CO2 del i8 suponen un verdadero récord incluso para pequeños coches utilitarios, con un consumo de apenas 2,1 litros y unas emisiones de CO2 de apenas 49 g/km. La conducción puramente eléctrica del i8 permite una autonomía de hasta 37 kilómetros, y una velocidad máxima de 120 km/h. La autonomía total, combinando gasolina y eléctrico es de 600 kilómetros.
La recarga de la batería de ión-litio del i8, se puede efectuar en tomas de corriente doméstica o en estaciones de carga públicas. Conectado a la estación de carga específica de BMW para instalar en el garaje, denominada “wallbox”, el i8 puede recargarse a un 80 % de su capacidad en menos de dos horas. El acumulador de energía de un i8 también puede recargarse conectando el cable que se entrega con el coche a una toma de corriente doméstica convencional. En ese caso, el tiempo de carga es algo inferior a tres horas. El acumulador de energía fue desarrollado ha sido concebido para que dure toda la vida útil del coche. Los clientes reciben una garantía para la batería de ocho años o 100.000 kilómetros.
Pero la eficiencia del BMW i8 también se pone de manifiesto en la práctica, en la conducción diaria. Dependiendo de la carga y de la longitud del trayecto recorrido, pueden alcanzarse valores de consumo que pueden considerarse excepcionalmente bajos para un coche deportivo. Los desplazamientos diarios convencionales en ciudad a velocidad moderada pueden efectuarse con un consumo de apenas 5 litros a los 100 kilómetros, utilizando ambas fuentes de propulsión. Si se abordan trayectos más largos por carretera o autopistas, el sistema de gestión “inteligente” del i8 logra combinar el placer de conducción de un deportivo con un consumo inferior a los 7 litros a los 100 kilómetros. En términos generales, el consumo del modelo híbrido eléctrico enchufable es aproximadamente un 50 % inferior al consumo de coches deportivos convencionales del mismo segmento, dotados únicamente de un motor de combustión.
En materia de seguridad activa, el i8 no tiene nada que envidiar a los deportivos de marcas renombradas. Dispone de chasis de aluminio, eje delantero de doble barra transversal y eje posterior de cinco brazos, servodirección electromecánica, sistema de control dinámico de la suspensión (DDC) y llantas de aleación de 20 pulgadas de diámetro. En cuanto la protección pasiva, encontramos airbags frontales, laterales, para las cabezas y tipo cortina, cinturones de seguridad automáticos con limitadores de fuerza adelante y atrás, sistema de anclaje Isofix para asientos de niños y control de la presión de cada neumático.
El equipamiento de serie es muy completo, incluyendo navegador con gestión del conjunto propulsor para la conducción puramente eléctrica. Además, el tablero de instrumentos con "display" digitalizado muestra informaciones según el modo de conducción, con representación de gráficas en tres dimensiones. El climatizador automático es del tipo bizona, con el que se puede regular independientemente la temperatura para las plazas delanteras o traseras. El sistema BMW iDrive de control de las principales funciones del i8, dispone de una pantalla de 8,8 pulgadas y botón de mando táctil. Por otro lado, en el interior se ofrece también, entre otras muchas variantes de equipamiento del habitáculo a elegir, volante deportivo con teclas que controla múltiples funciones, asientos eléctricos tapizados en piel y tablero de instrumentos forrado de piel.
También está disponible opcionalmente un paquete de equipamiento exclusivo, denominado “Pure Impulse”, que incluye faros led de seguridad de color azul, guarnecido del techo de color antracita, alarma antirrobo, sistema de audio de alta fidelidad Harman Kardon y depósito de combustible de gasolina de mayor tamaño. Adicionalmente, hay disponibles mordazas de frenos de color negro brillante, palanca de cambios de cerámica, tapa del motor de cuero y umbrales con listones embellecedores provistos del logotipo del modelo grabado con rayos láser.
