El Mundial de Moto2 vuelve a mostrarse como el campeonato más abierto. El de 2014 no sólo no es una excepción, sino que lleva al extremo la tendencia de que nadie puede confiarse y cualquiera pueda encaramarse a los puestos altos. Si la pasada temporada el clarísimo favorito era Pol Espargaró y tuvo que sudar sangre y lágrimas para acabar llevándose el entorchado, el presente curso, sin el español ni Scott Redding, ambos en MotoGP, llega lleno de alternativas, pero sin ningún firme candidato. En las apuestas repunta levemente Tito Rabat, y no le faltan motivos. En 2013 fue tercero tras Pol y Scott, y el cambio de equipo a una estructura al menos similar, el Marc VDS Racing, le convierte en foco de las 600cc desde el primer semáforo verde. Su compañero de equipo Mika Kallio también se encuentra en un punto de inflexión en su carrera. El finlandés será el segundo candidato y el primer rival de Tito Rabat. Junto a ellos, el habitual Tomas Luthi, que esta vez sí podrá empezar el Mundial desde la primera carrera, y una pléyade de pilotos nacionales que hacen soñar a la afición con un nuevo 'triplete'.
Múltiples bazas españolas
Nico Terol, siempre peligroso, Jordi Torres en el año que debe ser de su consagración, y Maverick Viñales, un novato que sube con la corona de Moto3 y que no para de quitarse presión, son las principales bazas españolas, que no las únicas. Otros hombres como Julián Simón y el recién ascendido Luis Salom también son esperados en los podios del mundo entero. Sin Redding y sin Espargaró, pero con la misma emoción de siempre en la temporada con más incógnitas desde el debut de la categoría. Moto2 se presenta en Catar y augura emociones fuertes.