Siempre sufrió problemas en sus primeras carreras en cada categoría, pero siempre se levantó, aplicó la calma y enfrentó sus retos con la experiencia de las caídas y el uso del cerebro para aplacar su pasión sobre las dos ruedas. Hasta ahora el plan le ha funcionado a la perfección.
Fue el campeón de Superstock con Ducati en 2011 y terminó como subcampeón de la Copa FIM Superstock 1000 ese mismo año cuando era un veinteañero. Esos resultados le sirvieron para conseguir una oferta para de trabajar como piloto probador para el programa de Ducati en Superbike. Con la marca italiana el ternano logró el puesto que buscaba en MotoGP en la primera temporada de las CRT de la mano de Ioda Racing Project, pero se encontró con una montura demasiado lenta para sus necesidades (su mejor resultado en el año de su debú fue un octavo puesto en la carrera postrera de Valencia).
Para la segunda temporada de 'Petrux' en la máxima cilindrada, el joven espera ser protagonista con su nueva máquina: una Suter-BMW. Su mayor desventaja es que no está acostumbrado a manejar motos de gran potencia y todavía no se ha habituado a la electrónica, por lo que arriesga para alcanzar a otros pilotos y suele probar el suelo con demasiada frecuencia para un piloto de MotoGP. Para alcanzar posiciones competitivas debe arreglar sus problemas de adaptación con la maquinaria y con su estilo de pilotaje que han provocado sus abandonos en numerosas ocasiones. SI supera su desventaja se podrá comprobar si es un piloto del nivel de la más alta categoría.