El cuarteto de españoles que encabeza la clasificación en la menor de las categorías del Mundial de motociclismo tiene este fin de semana una nueva cita con la historia. Esta vez les tocará correr de nuevo en casa, en el paraíso de la ciudad del motor que es Teruel para intentar dar rienda suelta al monopolio bajo bandera rojigualda que se ha establecido desde el inicio del campeonato. Pero cada uno de los cuatro pilotos que participarán en el Gran Premio de Aragón lo harán por un motivo distinto. Sobre todo el líder de la clasificación general, Luis Salom, quien ya sabe lo que es vencer en este circuito tras hacerlo el año pasado con su 125 recién estrenada. Ahora tiene una nueva oportunidad para demostrar que su salto hacia cotas más importantes está más próximo de lo que la gente pudiera imaginar y de paso dar casi por sentenciado el título mundial. A 19 puntos del segundo, Maverick Viñales, y 21 del tercero, Alex Rins, sus dos principales rivales han sufrido altibajos en lo que la temporada se refiere. La regularidad mostrada por el mallorquín es la clave en devenir de las carreras que faltan.
Será Rins el que tenga más opciones de auparse hacia el liderato, toda vez que contará con un arma secreta en su equipo que pudiera ayudarle en la consecución de tal objetivo. Se trata de Alex Márquez que ha experimentado una subida de potencial sin parangón en las últimas semanas y ha logrado sumar puntos para su autoestima y de camino echar una mano al otro catalán de la escudería Estrella Galicia. Por este motivo Salom confía en asestar un duro golpe en ‘Motorland’ a todos sus perseguidores antes de emprender viaje al continente asiático y a Australia. No quiere sobresaltos el balear, que ya toca con la yema de los dedos la corona de mejor pilotos en Moto3.
