La cuerda imaginaria que todavía sujeta a Pol Espargaró del liderato sustentado por Scott Redding se tensa más a cada carrera. Con 23 puntos de distancia entre ambos, ahora se les ha unido un nuevo competidor que bien pudiera echar una mano a su compatriota o aliarse con otros para intentar un asalto al líder desde el anonimato. Se trata de ‘Tito’ Rabat, aquel que va tercero sin hacer mucho ruido, dando un pasito poco a poco hacia la cima sin molestar. Es la sombra de Espargaró y casi que también se diría del británico. Ninguno de los dos lo nombra en las carreras, ni antes ni después, pero por ese motivo es el contrincante más peligroso que hay en la parrilla en estos momentos. Bien es cierto que el barcelonés del Tuenti HP40 se encuentra aún a 51 puntos de la cabeza, aunque sus últimas carreras y las buenas sensaciones le otorgan una importancia que nadie esperaba a principios del campeonato en Catar.
Ahora toca parada en Aragón, penúltimo viaje por suelo europeo antes de la gira asiática. Después llegará un nuevo aterrizaje en la tierra española, esta vez Valencia, para la última prueba. Pero quizá para entonces ya esté todo resuelto y nada de lo que ocurra sobre su asfalto sirva para dilucidar lo que tenga que ocurrir. Aragón es por ello el mejor escenario para que queden resueltas algunas dudas. Por ejemplo, si Redding está en condiciones de pilotar tras su operación la el miércoles de la semana pasada en un hospital de Barcelona. El inglés fue intervenido de un de un síndrome compartimental en el antebrazo derecho que le impedía tensar la musculatura y perdía fuerzas a la hora de correr. Estará, como es lógico, presente sobre las dos ruedas para este fin de semana. La pregunta es si lo estará en las condiciones necesarias para competir y mantener su liderato. Una oportunidad de oro para Espargaró y, quién sabe, si también para que Rabat dé un golpe encima de la mesa presentando su candidatura.
