Luis Salom, con el tobillo roto, volvió a poner a todos en fila detrás de él y se llevó la victoria en Silverstone. El actual líder del campeonato lo es más gracias a 25 puntos que saben a gloria y que golpean donde más duele a Maverick Viñales. El piloto del Calvo Team se tuvo que conformar con una cuarta posición escasísima para lo que se esperaba de él, vencedor de 2012 y con un ritmo soberbio todo el fin de semana.
El problema de Moto3 es que hay tanta igualdad entre las KTM que al que saca la cabeza los rivales le doblegan. Y Maverick se sintió superior y se lanzó a por la victoria, tirando y tratando de romper el grupo.
No fue posible, ni por intención ni por ritmo. Y es que el Mundial es de tres, con Alex Márquez aprendiendo a su rueda y subiéndose al podio cuando se lo permiten. Salom es el que conoce mejor el oficio. Supo esperar su momento y lanzó un ataque a vuelta y media para el final. No estaba claro si la táctica buena era dominar o esperar a rueda, pero el largo trazado inglés tiene la meta muy al principio de la recta, por lo que Rins fue incapaz de rebasar a su adversario.
Tercero fue Márquez, aprovechando el bajón de un desfondado Viñales, cuarto y a mucha distancia ya en el campeonato