El Ejército israelí ha destruido la sede del Ministerio de Exteriores palestino en Gaza en un ataque que ha causado 13 heridos, incluyendo a seis niños, y grandes daños materiales, realizado a primera hora de esta mañana.
Las fuerzas militares israelíes han confirmado el ataque sobre el Ministerio, llevado a cabo a las 00.30 h. -hora peninsular española-. Israel afirma que el Ministerio está "liderado por Hamás" y que ha sido empleado para la "planificación de ataques terroristas". El impacto de la bomba ha provocado la destrucción de la tercera y cuarta plantas del edificio en una inmensa bola de fuego que ha provocado grandes daños materiales en los edificios cercanos, donde 13 personas han tenido que ser atendidas al estar afectadas, principalmente, por los cortes producidos por cristales.
Horas antes, un ataque aéreo israelí cuyo objetivo era un grupo de personas en las localidad del sur de la franja de Gaza de Deir Al-Balah mató a cinco palestinos e hirió a otros seis. Según el Ejército israelí el objetivo del ataque era un grupo de milicianos. Con las últimas muertes la cifra de palestinos fallecidos en esta localidad asciende ya a 12.
Hamás quiere pactar con Hezbolá de cara al canje
Pese a todo, Hamás se mantiene en su postura y ha pedido hoy a Hezbolá coordinar las estrategias para poner en libertad a presos palestinos a cambio de los tres soldados israelíes secuestrados por ambas organizaciones terroristas. Ha llegado la hora "de un acuerdo serio y verdadero para que muchos prisioneros palestinos acaben su sufrimiento en cárceles israelíes", afirma Hamás en un comunicado emitido hoy, en el que además pide al Ejecutivo israelí "que escuche la voz de la razón" y responda a los "llamamientos de las familias de los prisioneros".
"La detención continuada de prisioneros palestinos da el derecho a la resistencia palestina y libanesa a capturar soldados israelíes", se destaca en la nota, en la que se indica, asimismo, que los ataques israelíes contra el Líbano "no resolverán el problema". También el ministro de Exteriores palestino, Mahmud az Zahar, ha declarado que "la única salida de la actual crisis en la región es la liberación de las mujeres, los niños y ancianos que se encuentran en las cárceles israelíes".
El ministro, que vive en la clandestinidad desde que Israel comenzó su ofensiva contra la franja de Gaza, afirmó que "el destrozo de las infraestructuras, el arresto de ministros y el asesinato de personas no nos intimidarán. Solo plantará la semilla del odio, no sólo en el mundo árabe y musulmán, sino en toda la Tierra." Entretanto, milicianos palestinos en la franja de Gaza continuaron hoy con el disparo de cohetes contra Israel. En otro comunicado, el brazo armado de Hamás se atribuyó el lanzamiento de una decena de cohetes contra Israel.
Abás teme una nueva "guerra regional"
Por su parte, el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, ha advertido hoy de que la incursión militar que lleva a cabo Israel en Líbano podría derivar en una guerra a escala regional, por lo que instó a la comunidad internacional a intervenir para "parar este grave deterioro". Abás aseguró también que de momento no hay conversaciones entre israelíes y palestinos para garantizar la liberación del cabo Gilad Shalit, el militar israelí secuestrado el pasado 25 de junio por tres grupos armados afines a Hamás -partido que controla el Gobierno palestino- y cuya captura ha sido respondida por Israel con una ofensiva militar de envergadura en la franja de Gaza. No obstante, afirma haber defendido "que el soldado debe ser liberado al igual que los presos palestinos", en referencia a la excarcelación de presos palestinos en las cárceles israelíes -cuya cantidad total está estimada en 9.000-.