El montañero jerezano Marcos Mosquera, que lidera la expedición Elbruz-Cordillera Blanca para la conquista de las cimas en Perú del Toclaraju e Ishinca, de más de 5.000 metros de altitud, espera en el campamento base de Pashpa una mejoría en el clima para intentar la ascensión del primer pico citado.
Tras llegar a Huaraz y hacer un registro de provisiones en tierras peruanas para el campamento base, la primera semana sirvió para la aclimatación física en altura. «Al principio tuvimos algunos problemillas de mal de altura, pero están solucionados. Los cambios son realmente bruscos, pasamos de los 20º a -5º en cuestión de treinta minutos. Anochece a las cinco de la tarde», ha comunicado el alpinista jerezano en estos últimos días gracias a Internet.
Excesivo viento
En la última comunicación recibida en la Gerencia Municipal de Deportes (colaboradora de la expedición) en la tarde del pasado domingo, Mosquera expresa que «de momento se nos hace imposible el ascenso de uno de los picos. Hace muchísimo viento ahora. Unos franceses que conocimos pertenecientes a otra expedición intentaron subirla antes de ayer (por el viernes de la semana pasada) y tuvieron que regresar con urgencia».
Pero la aventura del joven jerezano en el techo de Perú se ha teñido de negro en estos últimos días. Como ha comunicado Mosquera, alpinistas procedentes de Estados Unidos y Francia no han conseguido llegar a lo más alto y han fallecido en su intento de llegar a la cumbre: «En estos días hemos recibido la noticia de que en el intento de ascensión de unos picos más al sur han fallecido tres estadounidenses de otra expedición, así como un francés que iba sólo. Cometieron la imprudencia de arriesgarse a subir con mal tiempo». De hecho, la expedición andaluza van a ser muy cautos y a hacer uso de un parte de meteorología para no cometer imprudencia alguna: «Nosotros llevamos parte meteorológico diario, vamos bien protegidos y con viento ni se nos pasa por la cabeza ascender. No vamos a correr riesgos innecesarios, aunque estamos seguros de conseguir la gesta porque el tiempo se va a abrir».
Y es que a fin de cuentas el objetivo de Mosquera es claro aunque sin tomarse prisas ya que «la bandera de Jerez tiene que ondear aquí en lo más alto», donde se le hará un homenaje a Salazar.