Tengo 18 años. Nací cuando mi hermano Juanma, falleció de leucemia. No lo conocí, pero mis padres, Juan Manuel y Paqui, me contaron que era una maravilla de hijo. Pero la leucemia de los años 80 se lo llevó con Dios, ya que en aquellos años los transplantes de médula ósea estaban en pañales. Sé por mi padre que forma parte de Alceh, que desde 1987 esta enfermedad ya tiene buen pronóstico. Pero admiro a mi padre por la constancia con la que ha estado colaborando con esta ONG, intentando hacer cosas por estos enfermos y sus familiares. Me consta que muchas veces nos abandona un poco debido a su labor altruista, y como ya está prejubilado, lo tiene como causa humanitaria. También es miembro de la junta rectora de la Hermandad de Donantes de Sangre de Jerez desde hace muchos años, y siempre haciendo una labor humanitaria y altruista. Desde hace poco tiempo es también donante de sangre y plaquetas, aunque con los años y los achaques, no puede donar tanto muy a pesar suyo. Yo le pregunto de vez en cuando de dónde saca tiempo para tantas reuniones como él dice. porque también forma parte del colectivo del voluntariado y de la coordinadora de salud del Ayuntamiento de Jerez. Mi santa madre lo comprende y le da muchos ánimos para seguir en esta lucha sin cuartel, que es la sanidad. Como ya he cumplido, los 18 años, está detrás de mí para que me haga donante tanto de sangre como de órganos. Nadie sabe cuándo nos va a tocar. Un accidente, una operación y mil cosas más quelos jóvenes creemos que estamos inmunes, por la iconsciencia de la poca edad y la valentía que creemos que tenemos. Quisiera hacer un llamamiento a mis colegas, para que se hagan donantes, tanto de sangre como plaquetas y otros derivados de la sangre. Mi padre nos ha inculcado desde muy pequeños el ser solidarios, cono todo y a cambio de nada. Porque si seguimos como hasta ahora en este mundo, que Dios nos coja confesados.
Manuel Jesús Cristóbal Valle. Jerez