Josep: Ya lo estoy viendo. Tras la goleada de ayer ante Ucrania empezaremos todos a decir que somos los mejores, que el título está a nuestro alcance y que no se nos va a resistir ni Brasil. Te digo que no aprenderemos nunca. Pasamos de la decepción a la euforia en un minuto. Los españoles somos así, siempre.
Joaquín: El Mundial de Alemania no ha hecho más que empezar para nuestra selección. Sólo hemos ganado un partido y todavía queda mucho campeonato por delante como para hablar de favoritos ya, tan pronto. No podemos vender la piel del oso antes de cazarlo.
Josep: Esto va con nuestra manera de ser. Nos gusta dejar que el corazón mande sobre la cabeza. Hemos puesto a parir a Luis Aragonés por realizar tantos cambios en la alineación, por empeñarse en poner a Raúl cuando no estaba bien o por carecer de un sistema definido, pero hay que reconocer que ayer Aragonés demostró tener muy claro lo que quiere y como conseguirlo.
Joaquín: Por cierto, gran partido de Xavi Hernández. Era un futbolista al que había que esperar. Su manera de jugar era imprescindible para la selección. Eso es obra del seleccionador, al que criticamos en ocasiones sin demasiado fundamento.
Josep: La crítica es buena para todos y estoy convencido de que Luis es un buen encajador de ellas. En el fondo pienso que a él le divierten todos estos debates mediáticos que planteamos y que hasta los provoca para que nos divirtamos a costa de estas cosas, quitando presión a los jugadores.
Joaquín: No tengo la menor duda de que este va a ser el mejor campeonato para los nuestros. Nunca un seleccionador había trabajado tanto para tenerlo todo tan controlado. Están los mejores, son jóvenes y hay que mantener la confianza en ellos, aunque ya digo que falta mucho aún y sólo se ha ganado un partido de la primera fase.