Los que mejor le conocen aseguran que no se arruga ante nada ni ante nadie. Chico, un chaval del Cádiz profundo, de la barriada de la Paz. Sencillo y humilde, extrovertido y carismático, pero con una peculiaridad: juega extraordinariamente bien al fútbol y trabaja día a día para seguir mejorando. Nada más acabar la temporada con el filial cadista se marchó convocado con la selección andaluza para destacar en un torneo italiano. Ya está en la ciudad de vacaciones, que le sirven para ir al gimnasia y correr por las mañanas «y así llegar a la pretemporada un poquito más fuerte que los demás compañeros». Desparpajo le sobra. En poco más de un mes se sabrá por qué Oli ha confiado precisamente en el jugador más joven del segundo equipo para iniciar su proyecto de cantera.
-Ya ha regresado de Italia, ¿cómo ha vivido el torneo con la selección andaluza?
-Llegué hace una semana y estoy muy contento porque ha sido una gran experiencia. Salir de casa y viajar a otro país te abre la mente y te ayuda a madurar. Han sido nueve días muy especiales, en los que futbolísticamente (fue el jugador que más minutos disputó en su equipo) y personalmente me lo he pasado muy bien. Ha sido demasiado bonito.
-¿Demasiado bonito? ¿Qué pasa, que todavía no se lo cree?
-Es que aún estoy asimilando muchas cosas. En los últimos dos años he mantenido una muy buena línea ascendente. Hace dos temporadas estaba en el Juvenil y Calderón, al subir al Cádiz B, me llamó sin ser aún mi último año. Logramos la permanencia de manera increíble, y Antonio siguió confiando en mí. Ahora me dicen que el club cuenta conmigo para hacer la pretemporada con el primer equipo...
-¿Qué le debe a Calderón?
-Mucho, porque él ha confiado en mí. También, cada vez que ha contado conmigo le he respondido, no lo he defraudado.
Ilusionado
-¿Y cómo se encuentra después de haber escuchado que Oli cuenta con él para el primer equipo?
-Pues estoy muy ilusionado. Yo, mi familia y todos los que confían en mí. Intentaré hacerlo lo mejor posible.
-¿Cuándo se enteró de la noticia?
-Estaba precisamente en Italia y me llamaron del club, felicitándome porque había destacado en el filial y haría la pretemporada en el primer equipo. Todavía no he podido hablar personalmente con Oli, cuando llegué ya estaba en Oviedo.
-Para quien no le haya visto jugar, ¿puede explicar en qué posición juega Chico?
-Toda mi vida he jugado de defensa central, aunque en el Cádiz B Calderón me ha puesto en el medio centro, como pivote defensivo. También he actuado en el lateral derecho. Jugaré donde me pongan.
-Pero parece que Oli cuenta con usted como central.
-Eso me han dicho. En este momento sólo están Paz y De Quintana, pues tienen que ceder a De la Cuesta, y Fleurquin podría jugar allí. Yo completaría la plantilla.
-¿Va a Benalup de relleno o cree que puede ganarse un puesto?
-De relleno seguro que no. He destacado y por eso me han subido, para ser uno más del primer equipo. No me siento inferior a ninguno de mis compañeros, y voy a pelear por el sueño de toda mi vida que es jugar en el Cádiz. Porque yo soy de aquí.
-Pero entiende que sus competidores partan con más opciones.
-Claro. Paz y De Quintana tienen mucha más ventaja que yo porque son veteranos, pero llego con muchas ganas y repito, no me siento inferior a nadie. Sólo uno más.
-¿Cuentan que es de los que no se arruga?
-(Se ríe). Es verdad, soy un peleador nato. Tengo mucha ilusión y me encantaría poder jugar con el Cádiz en Segunda.
-¿También jugará con el filial?
-Eso es muy importante. Alternaré partidos con el primer equipo y con el Cádiz B, cuando Oli no cuente conmigo. Todavía me considero futbolista del filial y me cuesta un poco cambiar el chip. No debo perder la forma física y tener minutos es clave para seguir progresando.
El Más joven del Cádiz B
-Es el más joven del conjunto de Calderón y ya lo reclama Oli. ¿No le parece que va todo demasiado rápido?
-Sí, rapidísimo, pero si sigue así de bien pues por fin se haría realidad mi mayor fantasía. Pero no siempre fue color de rosa. Encontré dificultades cuando me subieron al Balón porque también era muy joven. Ahora me he asentado y he tenido dos años redondos que buscan el tercero.
-¿Tiene la cabeza bien amueblada?
-Sí, esas cosas no me afectan. Sé que es muy importante mantener la cabeza fría y seguir trabajando con humildad, no creérselo antes de tiempo.
-¿Es humilde?
-Mucho, y hasta que me muera. Vengo de la Paz, que es un barrio humilde, y si cuesta que salga un futbolista de la provincia pues imagínate ya de esta barriada. Soy la esperanza de muchos vecinos y también muchos gaditanos que confían en mí.