Una de las dos aulas que el colegio José de la Vega tiene habilitadas para sendos grupos de niños de tres años que cursan educación Infantil quedó completamente destrozada por un incendio, al parecer intencionado, que habría sido provocado la madrugada del domingo, según las primeras hipótesis con las que trabaja la Guardia Civil y la delegación de Educación, por uno o varios jóvenes alumnos o ex alumnos del centro.

Así, a su llegada a primera hora de la mañana, profesores y padres descubrieron los daños causados por las llamas, que habían calcinado por completo el equipamiento y mobiliario de una de las dos aulas y afectado a la segunda, lo que impidió que los alumnos pudieran dar clase con normalidad.

El asunto ha pasado rápidamente a manos de la Guardia Civil, que como en otros casos de vandalismo en centros escolares de la localidad, ha tomado huellas y fotografías de los daños para inicar las pesquisas que lleven al esclarecimiento del suceso.

De momento, y según confirmaba a este medio el propio delegado de Educación del municipio, «los autores no han entrado para robar nada, sólo han incendiado el aula», lo que refuerza la hipótesis de que los destrozos se deben a un acto vandálico.

La dirección del centro que se ubica en la barriada de Panzacola, ha decidido de momento albergar al primer grupo de niños de Infantil en las dependencias de la biblioteca, para lo que será necesario habilitar nuevo mobiliario, lo que podría retrasar su ocupación varios días.

En el caso del segundo grupo de niños de tres años del José de la Vega, los carteles informativos colocados a la entrada del centro hablan de que será mañana miércoles cuando puedan retomar sus clases con total normalidad.

Ayer mismo por la tarde un equipo de limpiadoras se afanaba en limpiar los restos del incendio que por fortuna no llegó a afectar a un transformador eléctrico existente junto al patio exterior. Tanto padres como dirección del centro esperan que se subsanen pronto los desperfectos y se atrape a los culpables cuanto antes.