Efectivos de la Policía Nacional detuvieron el pasado 20 de abril en Palma de Mallorca a Marco Rodolfo del Vento, 'Il Dottore', uno de los más importantes cerebros financieros de la mafia siciliana. Del Vento, milanés de 54 años y contra el que pesaba una orden internacional de busca y captura, está acusado por las autoridades judiciales italianas de asociación ilícita, tráfico de estupefacientes y «blanqueo de capitales procedente de actividades de tipo mafioso».

Según la Dirección General de la Policía, que ha mantenido en secreto la captura para evitar la huida de sus colaboradores en el extranjero, la localización de 'Il Dottore' es parte de «una amplia operación en la que han colaborado activamente los Carabinieri italianos y el Grupo de Localización de Fugitivos de Milán».

Los orígenes de la operación se remontan a 1995 cuando la policía transalpina desató una redada contra la organización del 'capo' Biagio Crisafulli, 'Dentino', máximo responsable de los grupos mafiosos sicilianos en Milán. Del Vento -explicaron fuentes de la investigación- ocupaba un «puesto de primer orden» en esta red, hasta el punto de «ser capaz de construir un imperio económico a través del lavado de dinero procedente de las actividades del tráfico ilícito de drogas así como de préstamos usurarios». El Ministerio del Interior sostiene que el fugitivo, a pesar de encontrarse en España, «seguía dirigiendo todo el entramado económico de la organización» a través de internet. Según las investigaciones de los agentes italianos, 'Il Dottore' huyó a España a finales de octubre de 2005, donde se registró como directivo de varias empresas nacionales. Tras moverse por Madrid y Barcelona, los expertos de la Policía creyeron localizarle en Baleares, donde fue detenido el 20 de abril.

Registros

En el momento de su detención le fueron incautados 12.880 euros, teléfonos móviles y tarjetas de crédito, así como una carta de identidad italiana falsificada. En los registros domiciliarios en España, tanto en la vivienda que tenía alquilada como en la habitación que ocupaba en un hotel, los funcionarios se han intervenido de dos ordenadores portátiles, varios dispositivos de memoria informática y gran cantidad de documentos, además de 30.000 euros. La detención del fugitivo ha dado lugar a una macrorredada en Milán en la que se han practicado trece detenciones, registros en domicilios y empresas y el bloqueo de «una importantísima cantidad de joyas, propiedades y cuentas bancarias» por valor de más de ocho millones de euros.