El PSOE regaló ayer al Gobierno, y especialmente a José Luis Rodríguez Zapatero, una fiesta por el segundo año cumplido por el Ejecutivo socialista en la que, con ritmos brasileños incluidos, los asistentes vitorearon y agradecieron su gestión al «bambi de acero» que dirige La Moncloa.
Prácticamente nadie del Gobierno, de la dirección del partido y de los presidentes autonómicos socialistas quisieron perderse el acto organizado por el PSOE en el palacio Vistalegre de Madrid, al que acudieron más de 20.000 personas, según los organizadores, que fueron «entretenidos» antes de las intervenciones con un espectáculo de danza y percusión del grupo Brasilerissimo.
Una convocatoria que sirvió para que quienes intervinieron en ella renovaran el espíritu de Vistalegre, en referencia al acto celebrado en este mismo lugar en el año 2002, cuando Zapatero era líder de la oposición, y que los socialistas consideran como impulso esencial de la victoria en las elecciones generales celebradas dos años más tarde.
Puesta en escena
La puesta en escena, con dos grandes pantallas para facilitar el seguimiento de las intervenciones, incluyó la proyección de un vídeo audiovisual, y la posibilidad de seguir por internet, por vez primera, un mitin de estas características en periodo no electoral.
Otra novedad, y que tuvo una amplia respuesta, fue la posibilidad de enviar mensajes SMS con textos que se reprodujeron durante todo el acto en la parte inferior de las pantallas gigantes ubicadas en el pabellón. En ellos pudieron leerse decenas de mensajes de apoyo y agradecimiento a Rodríguez Zapatero, de confianza en la victoria electoral dentro de dos años «Gran victoria en 2004 para colosal triunfo en 2008» pudo leerse en uno de esos mensajes), y de elogios por su gestión.
Odisea
«Zapatero, te quiero, bambi de acero», fue uno de esos mensajes que mandaron los asistentes, venidos de todas las comunidades autónomas españolas en decenas de autocares, y que inundaron el pabellón con una marea de banderas del PSOE y de sus regiones.
De hecho, la gran afluencia de autobuses hizo que llegar al palacio Vistalegre fuera casi una odisea, dificultada aún más por los cortes y desviaciones de la vía de circunvalación M-30.
Zapatero, Manuel Chaves, José Blanco, Rafael Simancas y Trinidad Jiménez fueron los intervinientes en un acto en el que los ministros que asistieron -todos excepto los titulares de Exteriores e Industria, Miguel Ángel Moratinos y José Montilla respectivamente, en viajes oficiales- tuvieron también su buena ración de ovaciones.
Especialmente atronadoras fueron las que recibieron Alfredo Pérez Rubalcaba (ministro del Interior), y María Teresa Fernández de la Vega (vicepresidenta primera), así como la que el entregado público dedicó al ex presidente del Gobierno Felipe González, que siguió el acto desde la primera fila junto al secretario general de UGT, Cándido Méndez.