-¿Cómo empezó a trabajar como administrativa ?
-Todo fue tras acabar COU en el instituto. La verdad es que no me gustaba demasiado estudiar y entonces empecé a trabajar en la empresa de mi padre como administrativa. Es una fontanería que trabaja en grandes obras y con la ayuda de mi actual compañera, que es quien me lo ha ido enseñando todo, he sabido desenvolverme bien.
-¿Cómo es su trabajo?
-Es bastante entretenido y estresante en determinadas ocasiones. Nosotros, como ya he dicho, nos dedicamos a hacer trabajos a gran escala en urbanizaciones y yo lo que hago básicamente es recoger todo el trabajo que hacen los empleados por escrito, se lo traslado a mi jefe y a partir de ahí comenzamos la producción... además de los trámites bancarios pertinentes.
-¿Qué aspecto de su profesión le gusta más?
-El trato con gente muy diferente. Desde una ama de casa que llama a la empresa en busca de una solución para un problema de fontanería que le ha surgido hasta un importante empresario, dueño de una constructora, que quiere hacer varias decenas de unifamiliares en una nueva urbanización.
-¿Qué es lo que detesta de ser administrativa?
-La verdad es que me gusta mi trabajo. No tengo muchas quejas. Ahora sí, cuando hay clientes que no te pagan en las fechas acordadas eso se transforma en un auténtico problema con el que una se agobia porque a su vez tenemos que atender nuestros pagos que no se pueden retrasar nunca.
-¿Volvería a estudiar de nuevo o ya ve ese aspecto de su vida muy lejano?
-Sinceramente... en la actualidad curso un master de Dirección de Empresa porque me he dado cuenta que es necesario estudiar. Retomar los estudios es algo que he hecho por mí, no por nadie más. Me he dado cuenta que siempre nos faltan conceptos y cosas por aprender y que con los estudios puedo llegar a solventar muchas dudas.