La Dirección de RTVE calificó ayer de «lamentable e indignante» la pitada de los «cerca de 300 trabajadores» -según fuentes sindicales- que obligó a suspender el Telediario. Asimismo, hizo público un comunicado para pedir «disculpas a los espectadores, a quienes se debe todo el respeto, por esta interrupción ajena a RTVE».

Por su parte, el secretario general de CC OO en RTVE, Marcel Camacho, puntualizó que la decisión de cortar el informativo fue «exclusiva responsabilidad de la dirección de TVE, que no sabe negociar en una situación de huelga». En cuanto a la incidencia de las protestas,«el hecho de que la dirección reconozca un seguimiento del 60%ya es un éxito», añadió su homólogo de UGT, Paco Andújar.

A pesar de ello, tanto la dirección de RTVE como de la SEPI han reiterado que no están dispuestos a negociar con los sindicatos sobre el modelo de RTVE, ya que esa tarea corresponde al Parlamento.