Rusia anuncia la toma de Mariúpol y la destrucción de un importante envío de armas occidentales
Según el Kremlin, las armas estaban destinadas a las fuerzas ucranianas en el Donbass, en el este de Ucrania
La «operación militar especial» no se ha desarrollado según los planes. Hasta el aparato de propaganda rusa ha dejado ver, de forma un tanto edulcorada, ese fiasco. Sin embargo, sí pueden anunciar la «victoria total» en Mariúpol tras la toma de Azovstal , símbolo de la resistencia ucraniana y que tras dos meses de asedio sus combatientes han recibido la orden de rendirse.
Rusia mantiene su acoso en el este de Ucrania tras declarar el viernes la «liberación total» de la ciudad de Mariúpol (sureste) con la rendición de los últimos defensores atrincherados desde hace semanas en la acería Azovstal.
Tras resistir en precarias condiciones en el laberinto de túneles subterráneos de esta fábrica, el medio millar de combatientes ucranianos que quedaban allí se rindieron el viernes, anunció el Ministerio de Defensa ruso.
Desde el lunes, un total de 2.439 combatientes se rindieron ante las tropas de Moscú, terminando con el último reducto de resistencia de esta ciudad portuaria del mar de Azov, devastada por meses de bombardeos.
El ministro ruso de Defensa, Serguei Shoigu , comunicó al presidente Vladimir Putin «el fin de la operación y la liberación total del complejo [de Azovstal] y de la ciudad de Mariúpol», dijo un portavoz.
Misiles Kalibr desde el mar
Además, el Ministerio de Defensa de Rusia ha anunciado este sábado que sus fuerzas destruyeron, con misiles de largo alcance, un gran cargamento de armas occidentales en el noroeste de Ucrania.
«Misiles Kalibr de alta precisión y largo alcance, lanzados desde el mar, destruyeron un gran lote de armas y equipamientos militares cerca de la estación de ferrocarril de Malin, en la región de Zhytómyr, enviado por Estados Unidos y países europeos», dijo el ministerio.
Agregó que las armas estaban destinadas a las fuerzas urcranianas en el Donbass, en el este de Ucrania, una región rusoparlante que ha estado parcialmente controlada por los separatistas prorrusos desde 2014 y que ahora es escenario de fuertes combates.
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