Qué es el Protocolo de Irlanda del Norte y por qué seguimos hablando del Brexit

Para proteger los acuerdos de paz de 1998 y evitar una frontera dura entre las Irlandas, la UE y el Reino Unido pactaron establecer controles aduaneros que ahora el Gobierno de Johnson

` Un cartel sobre que "El protocolo de NI rompe el acuerdo de Belfast", en el puerto de Larne (Irlanda del Norte) Reuters

ABC

El Protocolo de Irlanda del Norte es y será la principal patata caliente del Brexit. Para proteger los acuerdos de paz de 1998 y evitar una frontera dura entre las Irlandas, la UE y el Reino Unido establecieron controles aduaneros en el Mar de Irlanda entre Irlanda del Norte -que permanece en el mercado único de bienes de la UE-y el resto del Reino Unido.

La regulación europea no permite que ciertos productos, como las salchichas (de ahí la conocida como guerra de las salchichas), entren en su mercado. Pese a que desde enero ha estado vigente un período de gracia, ni Londres ni Bruselas han encontrado soluciones para conseguir un tráfico más fluido.

El Gobierno de Johnson amaga con activar el artículo 16 del Protocolo por el que suspendería el acuerdo alegando «dificultades económicas, sociales o ambientales», lo que impondría nuevos aranceles (o impuestos de importación).

Lo que propone el Reino Unido

-No más controles

El ministro del Brexit, David Frost, propone acabar con los controles aduaneros entre Gran Bretaña e Irlanda del Norte sobre los bienes que se ajusten a las regulaciones de la UE o del Reino Unido. Por el momento, estos productos que llegan a Irlanda del Norte deben cumplir las normas de la UE.

-Apartar al Tribunal de Justicia de la UE

El gobierno de Johnson también quiere que la Comisión y el Tribunal de Justicia de la UE dejen de supervisar el funcionamiento del Protocolo de Irlanda del Norte. Propone remplazar estas instituciones por un sistema de arbitraje internacional.

Lo que propone la UE

-Menos controles y papeleo sobre alimentos

Simplificar todos los trámites aduaneros de manera que se eliminen hasta el 80% de los controles sobre alimentos que lleguen a Irlanda del Norte, además de reducir a la mitad el papeleo necesario. Por ejemplo, un camión que llegara de Gran Bretaña con una carga de diferentes productos solo necesitaría un único certificado.

-El TJUE, una línea roja para Bruselas

Como Irlanda del Norte, pese a integrar el Reino Unido, sigue vinculado al Mercado Único, Bruselas insiste en que tiene que haber frontera (no dura) y sobre todo mantiene su línea roja sobre el papel del Tribunal Justicia de la UE a la hora de controlar el Protocolo.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación